Otro pleito internacional con Uruguay en puerta? El canciller de ese país, Reinaldo Gargano, dejó picando esa posibilidad al advertir ayer que su gobierno recurrirá en protesta al Mercosur si desde Argentina se promulga una ley que prohíba la exportación de rollizos de madera para las pasteras que se alzan frente a la costa de Entre Ríos. Se trata de un proyecto de ley en esa provincia, que tiene dictamen favorable en la Legislatura. Sería aprobado en febrero.

"Me parece una medida muy peculiar que por ley no se venda un producto a otro país del Mercosur", dijo Gargano en declaraciones radiales. El ministro de Tabaré Vazquez habló por radios de ambos países. Según él, la medida restrictiva pretende "liquidar" el bloque regional —compuesto por Argentina, Uruguay, Brasil, Paraguay y Venezuela— porque "viola el tratado de Asunción que creó el Mercosur y que en su artículo primero determina la libre circulación de bienes".

La eventual veda a la exportación de madera se sumaría al corte de las rutas a Uruguay que mantienen los vecinos de Gualeguaychú. Por este tema, Montevideo y Buenos Aires litigan en la Corte Internacional de La Haya. Frente a Gualeguaychú, ciudad turística entrerriana, se levanta la pastera Botnia, de capitales fineses, que está casi terminada.

El gobernador de Entre Ríos, Jorge Busti, confirmó ayer a Clarín que la Legislatura tratará y seguramente aprobará el proyecto para prohibir la exportación de rollizos de madera en febrero, en sesiones extraordinarias. El proyecto está en Diputados, por lo que sería la primera cámara en darle curso, y luego pasará al Senado provincial. Inmediatamente después, Busti la promulgará, según admitió a este diario.

En reunión de Gabinete, Busti y los legisladores oficialistas avalaron ayer esa estrategia. Lo confirmó el diputado provincial Juan José Bahillo (dato no menor: es de Gualeguaychú y en marzo se postulará como candidato a intendente del bustismo) quien manifestó: "Hemos decidido suspender la exportación de rollizos, ya que las pasteras nos van a contaminar y a perjudicar el medio ambiente". La ley es pedida por las asambleas de Gualeguaychú y de Colón y, en verdad, es un proyecto original del radicalismo, que luego fue modificado.

Fuentes del Gobierno entrerriano admiten que es una medida, sobre todo, gestual. Esos voceros oficiosos explican que, en verdad, la mayoría de las exportaciones de madera que salen de Entre Ríos son productos con valor agregado, elaborados, y que los rollizos para hacer pasta de celulosa sólo representan un 2,5 por ciento del total de esas exportaciones, que en 2005 —últimos datos— sumaron algo así como 52,5 millones de dólares.

Esos datos, sin embargo, no son respaldados por la industria maderera, donde temen quedar sin un mercado que hoy les interesa y definen el proyecto como anticonstitucional. En verdad, Busti cree que, para tener un impacto realmente importante, la prohibición de exportar rollizos debería ser debatida a nivel nacional, acaso buscando una iniciativa más abarcativa que alcance también a otras provincias que tienen muchas más hectáreas forestadas, como Corrientes o Misiones.

Sigilosamente en el Gobierno nacional empezaron a analizar el tema, mientras crece la presión de los asambleístas que siguen amenazando con impedir la salida de los ferrys de Buquebus. Fuentes oficiales aseguraron que, hasta ahora, no hay resultados muy alentadores porque la ley que planea sacar la Legislatura entrerriana puede ser considerada "discriminatoria" y, por eso mismo, choca contra algunas reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
(Por Mariano Pérez de Eulate, Clarín, 09/01/2007)
http://www.clarin.com/diario/2007/01/09/elpais/p-00601.htm