Governo argentino confia em novo diálogo com o Uruguai para resolver questão das papeleiras (em espanhol)
2006-12-07
Aunque los cortes de ruta en los pasos internacionales se mantienen, el Gobierno buscó mostrarse optimista sobre la posible evolución de la crisis por las papeleras. El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, expresó ayer su confianza en "que se abra un canal de diálogo que pueda ayudar a destrabar" el conflicto con Uruguay, a partir de las gestiones del enviado del rey de España al Río de la Plata.
Fernández destacó "el enorme esfuerzo" que está realizando el facilitador Juan Antonio Yáñez Barnuevo. Y calificó como "una buena charla" la que mantuvo con él este martes, en el Ministerio de Relaciones Exteriores, junto al canciller Jorge Taiana. "Ahora hay que tratar que todo esto tenga un resultado feliz", agregó.
En cambio, el jefe de Gabinete no ofreció detalles acerca de avances concretos en las negociaciones con Uruguay. Yáñez Barnuevo ayer viajó a Montevideo para volver a reunirse con la otra parte. Desde ambos lados se espera un gesto de la finlandesa Botnia, dueña de la pastera que crece enfrente de Gualeguaychú.
Un dato que no es menor: en su visita anterior a Montevideo, dos semanas atrás, el facilitador español había tenido como interlocutor a un funcionario de segunda línea. El lunes, al iniciar esta segunda ronda de conversaciones, lo recibió el presidente Tabaré Vázquez.
El embajador español "nos ha transmitido la predisposición del gobierno uruguayo de encontrar una solución rápida" a todo esto. Bienvenida sea, dijo Fernández en una entrevista radial. Yáñez Barnuevo volverá hoy a Buenos Aires para continuar con el intercambio de ideas y, tal vez, de fórmulas para alcanzar un acuerdo.
Fuentes del Gobierno consultadas por este diario indicaron anoche que ahora se espera la llegada de Yáñez con una propuesta en firme de Uruguay, que podría incluir la apertura de una mesa de diálogo que incluya al representante español.
Otra reunión importante en este contexto se produjo el lunes. Fue bastante más lejos: en Bruselas (Bélgica), el canciller español, Miguel Angel Moratinos, se encontró con su par de Finlandia, Erkki Tuomioja. A diferencia de la española ENCE, Botnia nunca detuvo la marcha de sus obras; le queda por construir apenas un 30 por ciento de su fábrica, cuya chimenea de 120 metros se levanta frente a la principal playa de Gualeguaychú.
Uruguay no parece dispuesto a dar un solo paso atrás en materia de cortes de ruta. De hecho, ya le reclamó a la Corte Internacional de Justicia que le ordene a la Casa Rosada que haga algo sobre el tema. Dentro de diez días, un equipo de la Cancillería deberá dar explicaciones en La Haya (Países Bajos), donde Uruguay ya logró una victoria en julio.
En los pasos internacionales la situación no mejora, sino todo lo contrario. A los bloqueos en el Puente Libertador San Martín, que une Gualeguaychú con Fray Bentos, ya se habían sumado los del Puente Artigas, que va de Colón a Paysandú. Ayer se agregó Concordia, con lo que quedará también bloqueado el ingreso hacia Uruguay por el Puente Salto Grande.
De todos modos, Alberto Fernández no fue el único que asumió una posición optimista. El ministro del Interior, Aníbal Fernández, coincidió: "Quisiera creer —dijo— que por la vía del diálogo se puede encontrar una solución". También criticó, como lo había hecho el presidente Néstor Kirchner la semana pasada, la decisión de Tabaré de enviar tropas del ejército uruguayo a custodiar las instalaciones de Botnia.
La gestión de Yáñez Barnuevo fue una iniciativa que Kirchner le hizo llegar a España en la última Cumbre Iberoamericana, ante el fracaso en el diálogo con Vázquez. El facilitador —embajador de su país ante las Naciones Unidas— hoy dará por terminada su misión.
(Clarín, 06/12/2006)
http://www.clarin.com/diario/2006/12/07/elpais/p-00301.htm