La decisión de los asambleístas de Gualeguaychú de cortar a partir de hoy y por tiempo indeterminado la ruta 136 que une las ciudades de Gualeguaychú y Fray Bentos, no sorprendió a algunos funcionarios del gobierno uruguayo, que se veían venir la medida de fuerza. Ante una consulta de Clarín, la vicecanciller Belela Herrera respondió con un lacónico "estamos resignados".

Según Herrera el tema fue creciendo en forma "muy irresponsable" y ahora es muy difícil detenerlo. Para graficar el concepto usó una imagen: "Cuando a un niño de escuela se lo lleva a la vera del río y se le dice que enfrente van a instalar una fábrica que los va matar a todos de cáncer, a ese chico, después, nadie va a poder convencerlo de que eso no va a ser así".

Ante la pregunta sobre qué puede hacer el gobierno uruguayo ante estos nuevos cortes, Herrera dijo que "tal vez Uruguay pueda ahora llevar un reclamo a La Haya, en sentido de que la Corte Internacional en su momento dijo, muy claramente, que debían evitarse los hechos que agravaran la situación, y ésto es una forma de agravarla". De todas formas, aclaró que de ese tema no se ha hablado.

Otros funcionarios se mostraron desorientados por el hecho de que la medida de fuerza se haya tomado antes del anuncio del Banco Mundial, previsto para mañana, de la entrega del crédito para la empresa Botnia. "Los ambientalistas de Gualeguaychú parece que son adivinos", ironizó el secretario de Medio Ambiente, Jaime Igorra, quien se enteró por Clarín de la noticia. "El Banco Mundial aún no se expidió y ellos ya están diciendo que va a otorgar los préstamos", comentó.

Para el funcionario, además de perjudicar al turismo, "el cierre de los puentes, en este momento, tiene también como objetivo perjudicar al sistema portuario uruguayo". Según Igorra, las compañías que tiene que llegar al puerto de Montevideo con su carga tienen dificultades, y por ellos se ven obligadas, muchas veces, a derivar las mercaderías que transportan a los puertos de Santos, Río Grande, Bahía Blanca o Buenos Aires.

Una fuente del gobierno dijo a este diario que "habrá que analizar profundamente el tema con los los ministros, y seguir profundizando con mucho rigor las líneas del derecho internacional y regional". Igorra se manifestó en igual sentido: "A Uruguay ahora le queda mantenerse apegado al derecho y a la razón", sostuvo.

Por su parte, el intendente de Río Negro, Omar Lafluf, sí se mostró sorprendido. "No sé qué más tenemos que demostrar, honestamente pensé que la ida de ENCE iba a destrabar el conflicto, estoy desorientado".

Para Lafluf mientras la voz y la opinión argentina siga siendo la asamblea de Gualeguaychú, el conflicto no tendrá solución. "El gobierno argentino tendría que definir claramente su posición, porque al menos así sabríamos dónde estamos parados".

Con resignación, Lafluf manifestó: "Me parece que tenemos que prepararnos para tener otra vez el mismo verano: y la gente que decida venir al Uruguay tendrá que cruzar por otro lado". Además se mostró muy preocupado con la situación que deberán afrontar los trabajadores del puente. "No vamos a soportar otra vez 90 días con la gente sin poder trabajar, a veces sin tener nada para comer".
(Por Guillermo Pellegrino, Clarín, 19/11/2006)
http://www.clarin.com/diario/2006/11/20/elpais/p-00401.htm