Kirchner viaja a Montevidéu em meio à crise entre países por instalação de papeleiras (em espanhol)
2006-11-03
Para el presidente Néstor Kirchner la situación debe tener algo de incomodidad: llegará esta tarde a Montevideo, para participar de la XVI Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, en medio de un rebrote de la tensión entre Argentina y Uruguay por las pasteras de Fray Bentos.
Por supuesto que no está prevista una reunión con el mandatario uruguayo, Tabaré Vázquez, una relación que se ha resquebrajado notoriamente. Los más optimistas, sin embargo, insisten en no descartar una bilateral sorpresiva. En todo caso, habrá que prestar atención a cómo se las arregla Kirchner para manejar las situaciones protocolares como si nada sucediera con el vecino.
Hoy espera al Presidente sólo la inauguración oficial de la Cumbre, a las 19 (hora local, en Argentina es una hora menos), a la que asistirán más de veinte representantes de Iberoamérica, entre los presidentes que asistan y los enviados de los que no puedan viajar. Y una cena en honor al secretario general de la ONU, Kofi Annan, quien pronto dejará el cargo. La situación con Uruguay volvió a ponerse compleja en las últimas horas debido, sobre todo, a dos cuestiones:
La asamblea ambientalista de Gualeguaychú decidió retomar los cortes de la ruta que cruza a Uruguay, la forma que eligieron para protestar contra la instalación de las plantas de celulosa frente a sus costas. Lo harán desde hoy y hasta el domingo, en sintonía con el desarrollo de la Cumbre. Especulan con que el evento sea una caja de resonancia para sus reclamos.
El Gobierno no tiene en sus planes usar las fuerzas de seguridad para desactivarlo. Esto hace que Uruguay lo acuse de "inacción" y condicione el diálogo a que se levanten los bloqueos. El Gobierno argentino acaba de presentar una queja formal ante la Cancillería uruguaya porque la administración Vázquez autorizó a la empresa finlandesa Botnia —cuyas obras están avanzadas— a extraer el doble de agua de lo previsto inicialmente del Río Uruguay para destinar a la producción de celulosa.
Para Buenos Aires eso significa más contaminación. Y analiza la autorización como una decisión inconsulta que vuelve a violar el tratado bilateral que fija una administración compartida del río. El embajador argentino en Montevideo, Hernán Patiño Mayer, admitió ayer que la situación con los vecinos "se agravó". Por su parte, el canciller uruguayo, Reinaldo Gargano, dijo que la solución al conflicto deberá surgir de una negociación política porque para su gobierno el tema "está resuelto técnicamente".
Gargano se refería a un informe de una consultora del Banco Mundial según el cual las pasteras no serán letalmente contaminantes. Montevideo toma ese informe como palabra santa. Por otra parte, Uruguay asegura que no se moverá de su propuesta de realizar un monitoreo conjunto de las aguas limítrofes y del funcionamiento de las papeleras, presentada en la última Cumbre del Mercosur celebrada en julio pasado en Córdoba.
A todo esto, la Corte Internacional de La Haya todavía no dirimió la denuncia que presentó Argentina respecto al incumplimiento por parte de Uruguay de los tratados internacionales. En cambio, falló a favor de los uruguayos cuando desautorizó el pedido argentino para paralizar las obras de las pasteras.
La Cumbre Iberoamericana tiene como eje central la problemática migratoria. Como en toda reunión de este tipo, los documentos finales ya fueron consensuados previamente y los presidentes sólo debe rubricarlos. Argentina ha presentado el Programa Patria Grande para regularizar a extranjeros, que aparece como uno de los más progresistas del continente.
A Kirchner lo espera, fuera de este tema, una reunión a solas con el jefe de gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, luego de recibir, ayer en Buenos Aires, al vicecanciller ibérico, Miguel Angel Moratinos. La deuda que Argentina tiene con España desde 2001 —960 millones de dólares— y la propuesta de reestructuración que se apresta a presentar Kirchner serán los ejes de esa charla.
(Por Mariano Pérez de Eulate, Clarín, 03/11/2006)
http://www.clarin.com/diario/2006/11/03/elpais/p-00301.htm