Globaliza-se a destruição do planeta (em espanhol)
2006-10-30
La globalización no incide únicamente en el ámbito económico, político, social, o militar, sino que la competencia que se da por la obtención de materias primas por parte de los países desarrollados ha hecho que exista un impacto severo e irreversible sobre los diversos ecosistemas.
La feroz explotación de recursos que las diferentes transnacionales han instaurado alrededor del mundo para así producir bienes de consumo y a su vez lograr efectivizar la formula dinero-mercancía-dinero propia del sistema capitalista, ha hecho que la naturaleza sea considerada no como un bien de la humanidad sino como una mercancía más que comprar o vender; el neoliberalismo tiene como concepto básico el libre mercado el en cual la oferta y demanda ha contribuido a requerimientos rapaces de recursos naturales; otro elemento de éste sistema son la suntuosidad frente a la utilidad de los bienes, ha existido todo un proceso de depredación ambiental no para satisfacer una necesidad sino una vanidad, es decir mientras en países dependientes como Ecuador o en África la gente se muere de hambre, en países desarrollados cada año se saca un nuevo modelo de auto para satisfacer la demanda que cubra con lujos a quienes ostentan el poder económico de estos países.
Edgar Isch Ex Ministro del Ambiente de la República del Ecuador al realizar el análisis de los impactos de la globalización en el plano ambiental nos proporciona los siguientes datos: “en los países en desarrollo el área de bosques a partir de la década de los 80 ha disminuido en un 10%, según el WRI, la cobertura boscosa original se ha disminuido en más del 50%, en el mundo, menos del 40% de los bosques se encuentra relativamente libre de presiones humanas; a nivel mundial el 30% de las principales cuencas hidrográficas ha perdido el 80% de la cobertura forestal original, en el siglo XX se han perdido el 50% de los humedales en el mundo, cerca del 40% de las tierras agrícolas están degradadas o fuertemente degradadas, según la FAO, hasta 1999 más de la cuarta parte de la existencia de peces a nivel mundial estaba agotada”
De acuerdo a estudios del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) “Los seres humanos están devastando la naturaleza a una velocidad sin precedentes y necesitaran el valor de los recursos naturales de dos planetas cada año en el 2050”; si se continúa a éste ritmo de destrucción de las fuentes de biodiversidad y agua dulce en el plazo de veinte años estarán prácticamente agotadas.
A esto hay que sumarle que los países con mayor desarrollo capitalistas son los más grandes depredadores de la naturaleza, así en la firma del Protocolo de Kyoto (pese a que este convenio es una medida paliativa frente a emisión de gases tóxicos a la atmósfera), el Gobierno de George W Bush no lo firmo, y entre los 12 países en los cuales sus habitantes tienen mayor impacto ecológico se encuentran Estados Unidos, demostrando así que para éstos gobernantes el único amo supremos es el Capital aunque se ponga en riesgo la vida del planeta para las futuras generaciones; ante ello cabe hacer una reflexión “no he visto en ninguna parte del mundo que al sembrar billetes, crezcan árboles con frutos de billetes y estos se los pueda comer”
Dentro de toda esta catástrofe con la naturaleza, ha que rescatar que según la nota de prensa publicada por el Diario El Universo de fecha 25 de Octubre del 2006 “Cuba es el único país del mundo con desarrollo sostenible, según el informe bianual presentado por la organización WWF, la cual ha elaborado en su informe un gráfico en el que sobrepone dos variables: el índice de desarrollo humano (establecido por la ONU) y la llamada “huella ecológica”, que señala la energía y recursos por persona que se consume en cada país. Solo Cuba tiene en ambos casos niveles suficientes que les permite se designado un país que “cumple con los criterios mínimos para la sensibilidad”. Lo que dejan en evidencia que cuando un gobierno y un estado se apartan del sacrosanto capitalismo y privilegian al ser humano, su desarrollo y su vida, como lo es el ejecutado por una política socialista, no solo que ganan sus habitantes sino la humanidad y el planeta.
No globalicemos la destrucción de la tierra, el sistema capitalista y su globalización no nos dejará dónde habitar; socialicemos la vida, instauremos un Estado en el que exista respeto al ser humano, a su porvenir y sobretodo permita una correlación sustentable entre la sociedad, desarrollo económico, naturaleza; ya tenemos un ejemplo a seguir el Estado Socialista de la hermana República de Cuba.
(Por Lic. Hítalo Stalin Pucha Cofrep, Eco Portal, 29/10/2006)
http://www.ecoportal.net/content/view/full/64291