El máximo ejecutivo de ENCE, la empresa española encargada de una de las papeleras de Fray Bentos, habría llegado a la Argentina en las últimas horas para mantener reuniones reservadas con el Gobierno en medio de las versiones sobre la decisión de la compañía de desistir del proyecto. Si bien no hubo información oficial, fuentes empresariales y del oficialismo dijeron que Juan Luis Arregui, flamante titular de la empresa española -que no tiene negocios en la Argentina- llegó en el máximo sigilo al país.

Apenas empezó a circular la versión sobre el viaje de Arregui, nacieron especulaciones respecto de eventuales gestiones de la empresa que junto con la finlandesa Botnia anunció lo que sería la inversión más grande en la historia de Uruguay (alrededor de 1800 millones de dólares), frente a la costa entrerriana.

Fuentes del mundo empresarial que conocen la iniciativa en detalle reiteraron en los últimos días que el ánimo que predomina entre los máximos directivos de ENCE es el de congelar de modo definitivo la fábrica proyectada sobre la margen oriental del río Uruguay, frente a Gualeguaychú. Sin embargo, la compañía no haría anuncio alguno hasta conocer la decisión del Banco Mundial respecto de la financiación de las obras.

Por ahora, y en una actitud que en el Gobierno no dudan en calificar como de cooperación, ENCE anunció que paralizaría las obras hasta diciembre. El futuro del proyecto Uruguay habría sido el tema central de una reunión que las más altas autoridades de la empresa mantuvieron en Madrid el miércoles pasado.

Contradicciones
Durante la jornada circularon gran cantidad de versiones. Una, por ejemplo, indicaba que Arregui se habría reunido en la Casa de Gobierno con el jefe de gabinete, Alberto Fernández. Voceros del funcionario negaron a LA NACION que haya ocurrido ese encuentro.

Sin embargo, algo similar ocurrió hace un mes, cuando durante la gira del presidente Néstor Kirchner por España, el mismo funcionario negó haberse reunido con ejecutivos de ENCE para hablar sobre la posible relocación de la fábrica, cosa que se confirmó algunos días después. De hecho fue entonces cuando el cambio de planes de la empresa, un secreto a voces que circula de modo informal tanto en Uruguay como en la Argentina desde hace semanas, empezó a tomar cuerpo definitivamente.

La voluntad expresada por los directivos ENCE en aquel entonces para relocalizar la planta de Fray Bentos fue el primer paso para descomprimir el conflicto binacional por las papeleras. Kirchner y Arregui tienen varias similitudes. Más allá de ser presidentes -uno de la Argentina y el otro de una empresa multinacional de capital español- comparten el mismo placer por tomar las decisiones en la más estricta soledad y son famosos por su temperamento.

Bajo esas premisas es que puede entenderse el viaje que Arregui habría hecho a Buenos Aires. "El Vasco", como apodan al presidente de ENCE, es además un hombre "obsesionado" por el control de los números. A diferencia de su antecesor en el cargo, un ejecutivo contratado para ocupar el puesto, Arregui es propietario del 11 por ciento de la empresa.

La versión sobre el desembarco del ejecutivo en la Argentina se difundió en medio del sugestivo clima que se gestó durante el fin de semana, luego de que LA NACION publicara que ENCE analiza archivar en forma definitiva su proyecto frente a la costa de Gualeguaychú.
(La Nacion, 01/08/2006)
http://www.lanacion.com.ar/politica/nota.asp?nota_id=827871&origen=relacionadas