Tribunal de Haya informa na próxima semana decisão sobre as papeleiras (em espanhol)
2006-07-07
El próximo jueves a las 10 de la mañana (las 5 de la Argentina), los 15 jueces de la Corte Internacional de Justicia regresarán con sus togas negras al Palacio de la Paz de La Haya. En una audiencia que no tomará más de media hora, anunciarán si acceden o no al pedido argentino de suspender la construcción de las papeleras de Fray Bentos. El anuncio de la resolución fue informado ayer por el propio Tribunal desde Holanda. Marcará el final de la primera etapa del juicio que la Cancillería planteó contra Uruguay hace dos meses, como consecuencia de la contaminación ambiental que provocan —según se sostiene en la demanda— las pasteras de ENCE y Botnia en el río fronterizo. Lo que vaya a decidir la Corte no puede ser apelado.
Argentina formalizó la solicitud de su medida cautelar el 8 y 9 de junio pasados, en dos audiencias que resultaron peleadas. Si bien se pretende que el freno a las obras sea más largo, anoche se especulaba en la Casa Rosada con que una suspensión por 30 días sería "aceptable" porque pemitiría "descomprimir" los ánimos en el Río de la Plata. Desde el comienzo de la crisis, las relaciones bilaterales vienen en franca mejoría: los presidentes Néstor Kirchner y Tabaré Vázquez pasaron de ignorarse a abrazarse, esta misma semana en Caracas. Ambos esperan la resolución de La Haya para definir el rumbo de sus conversaciones.
Sin embargo, el juicio tiene una segunda parte. Argentina pretende que se declare la "responsabilidad internacional" de Uruguay por incumplir un tratado firmado en 1975, al autorizar las obras sin consultas previas. El mismo jueves a las 12.30, la presidenta de la Corte —la baronesa inglesa Rosalyn Higgins— se pondrá de acuerdo con los jefes de las dos delegaciones —Susana Ruiz Cerutti por Argentina, Héctor Gros Espiell por Uruguay— sobre los plazos de presentación de los respectivos argumentos.
La medida cautelar o provisional solicitada por Argentina consiste en cuatro puntos:
Quiere que se mande a Uruguay a suspender los trabajos de ENCE y Botnia hasta que se resuelva el fondo del asunto. Esto podría llevar cuatro o cinco años.
Quiere que Uruguay se comprometa "de buena fe" a cooperar con Argentina "en la utilización óptima y racional del río".
Quiere que Uruguay se abstenga de tomar "cualquier otra medida unilateral".
Quiere que Uruguay no tome "cualquier otra medida que pueda agravar, dilatar o tornar más difícil la presente controversia".
Mañana, cuando regrese de la India, el canciller Jorge Taiana decidirá cómo se compone la delegación que viaja a La Haya la semana que viene. Estarían los embajadores Raúl Estrada Oyuela y Horacio Basave, más la flamante secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti. Son escasas las chances de que la Corte disponga exactamente lo que reclamó la Argentina. Como ya adelantó Clarín, sólo una vez en la última década el tribunal otorgó medidas de este tipo: en un pleito entre México y Estados Unidos por la aplicación de la pena de muerte. Y en el único caso resuelto últimamente sobre contaminación (Hungría contra Eslovaquia), se inclinó por la posición menos favorable a la preservación del ambiente.
En la Cancillería no se desaniman. También se darían por satisfechos si, por ejemplo, se manda a Uruguay a realizar informes ambientales más completos que los que ofreció hasta ahora. Y si nada de esto sucede, Argentina podría volver a pedir medidas cautelares. Pero debería encontrar algún hecho nuevo que amerite que la Corte Internacional se siente a analizarlo.
Hoy las obras de Fray Bentos están paradas de hecho. Influida por el gobierno de su país, la española ENCE tomó esa decisión a la espera de lo que se resuelva en Holanda; a las de la finesa Botnia, mucho más avanzadas, las frenó una huelga.
Otra variable: si La Haya falla contra Argentina, ¿los ambientalistas entrerrianos volverán a cortar los pasos fronterizos? Justamente por esto, Uruguay presentó una demanda en el marco del Mercosur por las pérdidas económicas que dice haber sufrido. Nuevos cortes empeorarían las chances argentinas en ese otro juicio.
(Por Pablo Abiad, Clarin, 07/07/2006)
http://www.clarin.com/diario/2006/07/07/elpais/p-01229421.htm