Nove comunidades indígenas contra petroleira francesa no Equador (em espanhol)
2006-06-13
Ante los hechos cometidos por Perenco, organismos de derechos humanos y de
medio ambiente han realizado las debidas denuncia ante la Defensoría del
Pueblo y Congreso Nacional. La primera de ellas, emitió una providencia por
la cual se pide a la petrolera el respeto a las desiciones de las
comunidades, se abstenga de actos de violencia y de cohersión.
Durante el pasado 31 de Mayo, en la Parroquia Puerto Murialdo se desarrolló
la histórica asamblea de 9 comunidades indígenas Kichwas en la cual se
ratificó su total oposición al ingreso a sus territorios de la empresa
petrolera francesa PERENCO, con este fin se constituyó un Comité de
representación de las comunidades cuyo trabajo recibió amplio apoyo nacional
e internacional. La Perenco extrae petróleo en el denominado Bloque 7 y 21
en un total de 400 mil Has. de Bosque amazónico y territorios
indígenas.
La violencia Petrolera
El pasado 17 de abril, la empresa Villacres Andrade, contratada por la
transnacional PERENCO (según información de los trabajadores) ingresó
arbitrariamente y de manera inconsulta con maquinarias pesadas ( dos
volquetas, 1 retroexcavadora, 1 tractor de orugas) a los territorios
comunitarios. Este hecho causo la inmediata movilización de las comunidades
que procedieron a detener el avance de los tractores que destruían el
bosque. Los trabajadores afirmaron que un ingeniero de la PERENCO era el
responsable de esta medida afirmando que las necesarias y debidas
autorizaciones llegarían después.
La compañía pretende extender actividades
extractivas hacia estas comunidades de manera contraria a las decisiones
indígenas, lo que es una violación de derechos reconocidos en la
Constitución Política del Ecuador y en el Convenio 169 de la OIT. Como
prueba de esta arbitrariedad la maquinaria fue retenida en la comunidad y
posteriormente entregada al Consejo Provincial de Orellana. En respuesta, la
empresa ha iniciado procesos de persecución de los líderes Jorge Grefa e
Isaías Ramírez, contra quienes ha iniciado juicios penales por supuestos
robos y destrucción de las máquinas.
El día 16 de mayo un helicóptero de la empresa persiguió a una canoa en la
que se transportaban 12 miembros de la comunidad, entre mujeres, jóvenes y
niños, que acudían a una inspección oficial en el lugar donde ingresaron las
maquinarias. Los indígenas pasaron momentos de pánico y pensaron que la
canoa se hundiría.
La noche del 26 de abril, dos días después de una Asamblea indígena donde se
ratificó la oposición al ingreso de las petroleras, el sacerdote de la zona,
Salomón Román, que ha acompañado la resistencia indígena, sufrió un atentado
contra su vida. A pesar de que un hacendado de la zona se ha atribuido las
responsabilidades de este hecho, no se ha descartado las posibles
implicaciones de la Perenco pues uno de sus familiares es el encargado de la
seguridad de la petrolera y las mismas personas que están al servicio de la
petrolera protegen a los hacendados. Dos vehículos lo persiguieron hasta
llegar a la Iglesia, donde varios sujetos armados le dispararon 6 veces. El
sacerdote salvó su vida al esconderse al interior de la misión.
La dignidad Indígena
Ante los hechos cometidos por Perenco, organismos de derechos humanos y de
medio ambiente han realizado las debidas denuncia ante la Defensoría del
Pueblo y Congreso Nacional. La primera de ellas, emitió una providencia por
la cual se pide a la petrolera el respeto a las desiciones de las
comunidades, se abstenga de actos de violencia y de cohersión tendientes a
influir una cambio de posición y reconociendo al derecho de las comunidades
para vivir en un medio ambiente sano. En relación a estos hechos se ha
anunciado las comparecencias al Congreso Nacional de los Ministros de
Energía y Minas, y del Ambiente. Además, el Presidente de la Comisión de
Medio Ambiente y Salud del Congreso Nacional ha anunciado la adopción de
medidas parlamentarias tendientes a garantizar los derechos indígenas.
Por su parte la CONAIE, presente en la Asamblea de Puerto Murialdo ratificó
su apoyo total a las iniciativas de defensa de los derechos culturales y
territoriales de las comunidades indígenas y su disposición a apoyar la
resistencia local. Los organismos de Derechos Humanos vigilarán por la vida
de los afectados y amenazados por la compañía Perenco.
La asamblea realizada el pasado 31 de mayo contó con la presencia de
representantes de la comunidad de Sarayaku, quienes en lengua Kichwa
alentaron la resistencia a las petroleras insistiendo en la importancia de
las revindicaciones culturales y de la exigencia de respeto a los derechos
de los Pueblos indígenas. Resultado de la asamblea se creó el Comité de las
comunidades Kichwas de Puerto Murialdo, se ratificó una vez más la oposición
a la presencia de la petrolera en sus territorios y se hizo un llamado a la
vigilancia y solidaridad nacional e internacional. Internacional.
Actúa Ahora
La resistencia a la destrucción petrolera se redicaliza en la Amazonía y
lucharemos para evitar la expansión de la frontera petrolera en los
territorios indígenas y áreas protegidas. Puedes ACTUAR enviando la Carta de
Apoyo a las comunidades indígenas de Puerto Murialdo contra los atropellos
de la compañía Perenco, que se encuentra en nuestra página Web.
(Por José Proaño, Eco Portal, 09/06/2006)
http://www.ecoportal.net/content/view/full/60214