Projeto da Stora Enso entra na argumentação argentina contra o Uruguai em Haia (em espanhol)
2006-06-09
Al término de la primera jornada de audiencias en La Haya representantes del Poder Ejecutivo coincidieron en sus críticas a la presentación argentina. Todas focalizadas a la reiteración de los argumentos expresados desde hace meses desde distintos ámbitos del país vecino, así como en la carencia de respaldo técnico y legal de las afirmaciones realizadas.
El subsecretario de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Jaime Igorra, también calificó la presentación argentina como "catastrofista". Y se preguntó si la extensión del radio de influencia de las plantas a 40 kilómetros sin sustento científico era porque Gualeguaychú "se encuentra a 37 kilómetros y de alguna manera había que incluirla".
Además aseveró que tampoco se conoce la base de las afirmaciones que sostienen que el mercurio y el cianuro serán parte de los residuos de las plantas. Y que resultaba sorpresiva la inclusión del emprendimiento de Stora Enzo en la argumentación, debido a que esta fábrica se instalaría en el centro del país y no en la zona limítrofe. Por lo que subrayó que los niveles de contaminación registrados en el riachuelo bonaerense, que también desemboca en un río compartido, "descalifican" al país vecino como candidato a ejercer un rol de "vigilante ambiental".
En un tono más recatado, el canciller Reinaldo Gargano afirmó que "los argumentos esgrimidos por Argentina son los mismos que utilizan desde hace tiempo", salvo por la referencia a la futura planta sueca que se instalaría en Durazno, concluyendo de manera similar a la de Igorra pero en base a las decenas de plantas de celulosa argentinas que desde hace varias décadas producen sin controles rigurosos y con tecnologías añejas.
Finalmente el vicepresidente de la República, Rodolfo Nin Novoa aseveró que las presentaciones de la delegación de la vecina orilla "no fueron muy sólidas" y que se recurrió en exceso al "melodrama". En ese sentido remarcó que si bien se reiteraron argumentos conocidos en esta ocasión se puso más énfasis en los factores económicos, aunque "todas son presunciones porque las plantas todavía no están funcionando y no se puede demostrar nada y por ello apelan a los sentimientos".
(La Republica, 09/06/2006)
http://www.larepublica.com.uy/lr3/?a=nota&n=213423&e=2006-06-09