Canadá se afasta do Protocolo de Kyoto (em espanhol)
2006-06-08
La posición canadiense es una amenaza para las futuras negociaciones del Protocolo. Canadá, uno de los países que más
se esforzó para que el Protocolo de Kyoto diera buenos resultados, viene alejándose de las orientaciones del acuerdo
mundial en los últimos meses. El cambio de rumbo se inició desde que el Partido Conservador asumió el Gobierno del país
este año y anunció que no cumplirá los compromisos firmados por el Protocolo. El nuevo Gobierno, de extrema derecha,
tiene una política a fin con la del norteamericano George Bush.
Todas las políticas canadienses y programas gubernamentales para la reducción de emisiones de contaminantes, como
inversión en energía limpia y comercio de carbono, fueron suspendidos por el actual Gobierno. El discurso oficial usado es
que Canadá no estaría abandonando el Protocolo, pero asume que seria imposible cumplir sus metas en el período
determinado de 2008 a 2012. “El Partido es de extrema-derecha y tiene una política a fin con la de George Bush (presidente
de Estados Unidos). Es un partido contra el Protocolo de Kyoto”, afirma Mark Lutes, investigador asociado al sector de
estudios climáticos de la organización no gubernamental Vitae Civilis.
El investigador sostiene que la postura de Canadá es una estrategia para esquivar los compromisos asumidos. Las
emisiones canadienses registraron un aumento significativo desde el comienzo de la década de 90. Y recién el año pasado el
Gobierno comenzó a implementar un plan estratégico para contener y reducirlas.
El Partido Conservador tiene sede en la provincia canadiense de Alberta, donde el país concentra sus mayores industrias de
petróleo. Se utiliza mucha energía para procesar el tipo de petróleo que existe en esa región. Lutes explica que la
contradicción es que las petroleras usan gas natural como matriz energética. “Usan una fuente limpia para hacer petróleo
que es una fuente sucia”.
No hay sanciones previstas para el no cumplimiento de las orientaciones del Protocolo de Kyoto, salvo la posición contraria
de la opinión pública de la comunidad internacional. Según el articulo 27.1 del Protocolo, los países signatarios sólo pueden
retirarse formalmente del acuerdo después de tres años de la fecha que el documento entro en vigor (febrero de 2005).
Peligro significativo
Para Mark Lutes, la posición que el gobierno canadiense viene asumiendo es una amenaza para las futuras negociaciones
de Kyoto, ya que Canadá es un país que agrega consenso en las discusiones de asuntos climáticos. “En Montreal (2005), el
mundo decidió ir adelante sin Estados Unidos (en la ratificación del Protocolo de Kyoto). Para países como Japón, Nueva
Zelanda y Noruega fue muy difícil seguir sin EUA. Canadá fue el mayor responsable por ese avance”, dijo. Después de 2012,
cuando concluya el primer período de negociaciones, los miembros deberán decidir el rumbo siguiente. Las metas que no se
alcancen hasta entonces, se sumarán al período siguiente. Si no existen perspectivas para la segunda fase, todas las
acciones hasta 2012 pierden sentido.
Brasil
A pesar de formar parte del Protocolo de Kyoto, Brasil, como los demás países en desarrollo, no posee metas de reducción
de emisiones de gases. Lo curioso es que el país ocupa hoy el quinto lugar entre los mayores emisores del mundo. “Brasil
debe repensar una meta para, en el próximo período, discutir como avanzar. Brasil es altamente industrializado y su
deforestación es responsable por el 75% de las emisiones”, opina Lutes. Para este investigador, los países en desarrollo
deben tener metas establecidas, caso contrario será muy difícil convencer a los países ricos a adoptar mayores índices de
reducción de gases de efecto estufa.
(Agencia Carta Mayor, 07/06/2006)
http://www.ecoportal.net/content/view/full/60110