En medio de las gestiones y contactos realizados ayer por el presidente Tabaré Vázquez en la ciudad de Washington, definió que el próximo 25 de mayo se realice en Fray Bentos la postergada reunión del Consejo de Ministros como forma de apoyar la instalación de las plantas de celulosa. La fecha que definió Vázquez para llevar adelante la reunión ministerial tiene mucho de reacción ante el hostigamiento que es objeto el país en el marco del diferendo con Argentina por la instalación de las plantas de celulosa en Fray Bentos, pero no es una decisión tomada por esa sola razón.

El 25 de mayo no es solamente la fecha patria de Argentina, es, y a no dudarlo, un días quizás más importante para el presidente argentino Néstor Kirchner. Ese día, el presidente argentino cumple tres años en el poder. Para ello, convocó a una movilización a la Plaza de Mayo para conmemorar tanto la histórica fecha como su ascenso a la primera magistratura. Para ese día, Kirchner ya se trazó una meta: "en la Plaza de Mayo deben haber por lo menos 100 mil personas o es un fracaso". Para ello se apela a sindicatos, gremialistas, intendentes, gobernadores, legisladores y piqueteros amigos, entre otros, para garantizar una plaza llena.

El temor a una plaza sin alma tiene, por cierto, antecedentes muy cercanos que no dejan dormir al presidente argentino: las multitudinarias movilizaciones de Juan Carlos Blumberg en reclamo de seguridad tras el asesinato de su hijo; o el mitin en apoyo al ahora destituido jefe de gobierno Aníbal Ibarra. La última movilización en Gualeguaychú, realizada el domingo 30 de abril es el último de los espejos en que se mira Kirchner. Así, el 25 de mayo mientras un presidente, Néstor Kirchner, estará empeñado en mostrar al mundo hasta donde llegó la concentración de su poder, otro, Tabaré Vázquez, se instalará con su gobierno en defensa de inversiones genuinas y necesarias para desarrollar el país.
(La Republica, 03/05/06)
http://www.larepublica.com.uy/lr3/?a=nota&n=209696&e=2006-05-03