Los gobiernos de Uruguay y Argentina prosiguen el diálogo en búsqueda de una salida negociada al conflicto por la instalación de las plantas de celulosa. Sin embargo, Argentina ya se prepara para ir a La Haya. El gobierno uruguayo afirmó que las relaciones con Botnia son "estupendas". Uruguay, por su parte, avanzará sobre el Mercosur y otros reclamos en el área jurisdiccional que serán ejecutados y ordenados directamente por el presidente Tabaré Vázquez, revelaron a LA REPUBLICA participantes de la reunión que en la víspera mantuvieron todos los cabeza de lista del Frente Amplio con el secretario de la Presidencia Gonzalo Fernández.

Ayer en la tarde Fernández citó a los líderes sectoriales para informarles sobre los pasos dados por el gobierno en la negociación con Argentina y los planes que tiene en el futuro. La reunión se llevó a cabo en el Edificio Libertad y el único tema tratado allí fue el diferendo por las plantas de celulosa. "Uruguay es un país agredido por los piqueteros", dijo el secretario de la Presidencia, y ese será el fundamento que usará el gobierno para hacer el reclamo ante el Mercosur, la OEA e "incluso ante la Corte de La Haya, si es necesario".

Fernández informó ayer que el Presidente tomará en sus manos la conducción de ahora en adelante del conflicto, y todas las decisiones reposarán sobre su persona. El secretario de la Presidencia dijo, no obstante, que ello no significa que su gestión se haya agotado ni mucho menos, por el contrario, sigue adelante. Fernández informó, además, que la relación con las empresas, lejos de estar deterioradas "son normales". En la pasada edición del diario argentino Clarín se señalaba que el malestar del gobierno uruguayo con Botnia iba en aumento hora tras hora. "Esas son elucubraciones interesadas de la vecina orilla", dijo otro participante de la reunión a LA REPUBLICA. Antes del encuentro con los cabeza de lista, Fernández se había reunido con representantes de la empresa Botnia. El presidente del Frente Amplio, Jorge Brovetto, dijo a LA REPUBLICA que las relaciones del gobierno con la empresa Botnia, "son estupendas".

Diálogo se mantiene
Mientras tanto, de acuerdo con lo afirmado por fuentes de ambos países, el diálogo establecido para resolver el diferendo continúa pese a la reinstalación del piquete en Gualeguaychú. Igualmente indicaron que la solución al diferendo, si bien se espera que sea rápida, no está tan cerca como parecía estarlo el lunes pasado, antes de que la empresa Botnia comunicara la suspensión de sus obras solo por 10 días y motivara que Argentina desistiera de realizar la cumbre presidencial donde se resolvería el conflicto, por entender que ese plazo no es suficiente para realizar el estudio de impacto ambiental. Desde el gobierno nacional se aseveró que "se continuará conversando hasta que se vea que no hay salida, recién ahí se tomarán acciones legales", que podrían plantearse tanto ante el Tribunal Arbitral del Mercosur como ante la sede magistral internacional de La Haya.

Reunión con piqueteros
Los informantes también aseveraron que Uruguay no va a tomar ninguna acción por el piquete instalado en el puente General San Martín, hasta ahora el único piquete reinstalado, debido a que el despeje de las rutas corresponde al gobierno argentino. Más allá de esto hoy el subsecretario de Trabajo Jorge Bruni se reunirá en Fray Bentos con los trabajadores del paso de frontera para conocer sus planteos y comenzar a prever la adopción de medidas para evitar que estos empleados vinculados al puente bloqueado pierdan su fuente de ingresos como consecuencia del corte.

Consultadas acerca de las acciones que emprenderán las autoridades de la vecina orilla respecto a los piqueteros, las fuentes argentinas dijeron que si bien todavía no se resolvió nada en particular, la reunión que estaba prevista para el lunes entre representantes del gobierno y de los asambleístas quedaría cancelada en las próximas horas. En esta resolución también habría incidido la otorgación de un cuantioso crédito a la empresa Ence.

A la vez, las fuentes resaltaron que el jefe de gabinete y las autoridades provinciales "están haciendo lo imposible por desalentar la adopción de ese tipo de medidas, aunque no se tiene respuestas para darles ante la postura de Botnia". En tanto, el foro de asambleas ciudadanas del río Uruguay, que integran representantes de cuatro ciudades costeras, fue convocado para mañana en Concepción del Uruguay con el fin de debatir sobre eventuales acciones comunes de protestas contra la instalación de dos papeleras en Fray Bentos.

Uno de los temas que por estas horas dispararon variadas reacciones entre los asambleístas fue la idea de convocar a un plebiscito que hizo pública el gobernador de Entre Ríos, Jorge Busti; y que sería convocado en Gualeguaychú y Colón para que la población de las dos ciudades se exprese si está de acuerdo con la mecánica de cortes de rutas para expresar disconformismo con la situación generada por las papeleras.

Argentina irá a La Haya
Pese a la "buena voluntad" que expresan los representantes de ambos gobiernos, el jefe del gabinete argentino volvió a plantear ayer que su país podría recurrir a la Corte Penal Internacional de La Haya para dirimir la controversia. "Si Botnia toma esta tesitura y si vuelven los cortes de ruta, no están dadas las condiciones que los presidentes fijaron en Chile para reunirse y entonces tenemos que seguir la defensa de los derechos de Argentina ante el Tribunal de La Haya", aseveró Fernández.

La idea ya había sido planteada por el funcionario a principios de este año, e incluso el Ejecutivo entrerriano elaboró un proyecto de declaración que fue aprobado por la Legislatura y luego hizo lo propio el Congreso Nacional, el cual a fines de febrero pidió formalmente al gobierno que concurriera a ese tribunal. A la vez, Fernández reiteró que la reunión entre Vázquez y Kirchner se frustró únicamente por la decisión de Botnia, tras lo cual sostuvo que "no entiende semejante negativa", a admitir la paralización por 90 días para realizar el estudio de impacto ambiental "que nunca nadie hizo" y que "es tan elemental". Además, aseguró que no es intención de Argentina decirle a Uruguay "cómo debe ser su trato con los inversores, sino que respete la ley que existe entre nosotros", en referencia al Tratado del Río Uruguay suscripto entre ambos países en 1971, el cual desde la óptica del gobierno vecino fue incumplido con el inicio de la construcción de las plantas.
(La Republica, 07/04/06)
http://www.larepublica.com.uy/lr3/?a=nota&n=207480&e=2006-04-07