Na semana passada, o intendente da Décima Região chilena, Jorge Vives afirmou que era mentira a presença de dioxinas no meio ambiente de Valdívia, sul do Chile, onde está localizada uma unidade da Celulose Valdívia. No entanto, estudos da Universidade Austral informam o contrário, conforme apresentado na nota à imprensa divulgada abaixo:
El profesor y jefe del laboratorio de Química Ambiental del Instituto de Química de la Facultad de Ciencias de la Universidad Austral de Chile, Hernán Palma, aseguró que de acuerdo a las mediciones realizadas se detectaron altas concentraciones de AOX en el sector de Rucaco donde se ubica la Planta de Celulosa Valdivia y aseguró que se incrementó peligrosamente la presencia de dioxinas en el medio ambiente, compuesto altamente tóxico que puede tener efectos negativos en la salud humana.
El científico participó en el Estudio sobre origen de mortalidad y disminución poblacional de aves acuáticas en el Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter de la Universidad Austral de Chile, señaló que el AOX es un compuesto químico resultante de la utilización de cloro y dioxido de cloro en la producción de celulosa y un importante precursor de las dioxinas.
— Verificamos las concentraciones de AOX y las mediciones hechas por el SAG que confirmaron la presencia de dioxinas en los cisnes de cuello negro que habitaban el Santuario. Sin embargo, nos llama la atención que estén presentes en el egeria densa (luchecillo), una planta que no debería acumularla. Esto es algo que nos preocupa - aseveró el investigador.
Cabe recordar que la planta de celulosa de Celco deposita sus riles en el río Cruces, lo cual, 35 kilómetros aguas abajo da vida al Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter, pasa frente a Valdivia y luego da origen al estuario, recorrido en que se desarrollan distintas actividades económicas vinculadas a la producción de alimentos como lácteos, ganadería, frutales, verduras y hortalizas y recursos marinos como mariscos y pescados.
DIOXINAS SON VOLATILES Y CANCERIGENAS
Hernán Palma recalcó que las dioxinas son bioacumulables y biomagnificables, traspasándose al ser humano a través de la cadena alimentaria. — Como son semivolátiles, es difícil que no existan dioxinas cuando hay una fuente directa en algún lugar cercano.
El experto dijo que, al ser altamente tóxicos, son altamente cancerígenas y peligrosas para la salud humana. Además, afectan la reproducción y pueden causar problemas de imposibilidad para mantener el embarazo, además de mutaciones congénitas en niños. Otras complicaciones son disminución de la fertilidad, reducción de espermatozoides, diabetes, problemas de aprendizaje, disminución del sistema inmune, problemas pulmonares y a la piel, entre otros.
Cabe destacar que este tema tiene especial relevancia en el caso de la planta de Celco en Valdivia, dada la cantidad de residuos industriales líquidos que deposita diariamente en el río Cruces, que asciende a 77 millones de litros por día, considerándose a esta factoría como una de las plantas de celulosa más grandes del mundo. Además, la producción de pulpa de celulosa es considerado uno de los procesos industriales más contaminantes del planeta y aunque se tomen las medidas para la disminución de las toxinas que emanan de su proceso industrial, no es posible eliminarlas totalmente y además no es extraño que ocurran derrames accidentales de elementos altamente tóxicos, como ocurrió en los últimos meses con la planta Valdivia y Arauco, ambas de Celco, en la Décima y Octava Región y en la última semana, la panta Pacífico de CMPC, en Collipulli, Novena Región.
(Com informações de Universidad Austral de Chile)