Ante el fracaso del diálogo entre la comisión de Ministros y los marchistas que defienden el TIPNIS, el jueves 8 de setiembre se reanuda la caminata con dirección a La Paz. Mientras tanto, un contingente de policías se trasladó a Yucumo, donde un grupo de colonos bloquean la carretera para forzar a las indígenas a negociar un acuerdo con el presidente Evo Morales.
El domingo pasado, la comitiva ministerial presentó seis propuestas de trazo de la carretera Villa Tunari- San Ignacio de Moxos, que sustentó la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), Sin embargo, todas pasaban por el Tipnis, por lo que fueron rechazadas. Entonces, pidieron a los indígenas una propuesta técnicamente factible.
“La posición de la marcha es que la carretera no pase por el TIPNIS, ahora nos piden hacer propuestas técnicas, pero ésa no es nuestra competencia; nosotros no firmamos el contrato con la OAS, que lo haga el Gobierno por donde quiera, menos por medio del parque”, señaló Celso Padilla, presidente de la Asamblea del Pueblo Guaraní (APG).
Carlos Romero, ministro de la Presidencia, aseguró que las opciones de trazo por fuera del TIPNIS no eran viables técnicamente, por lo que el tema debe ir a una consulta previa que sería vinculante, aunque luego afirmó que si el trazo no va por el medio de la reserva natural, entonces no habría carretera.
Debido a la posición del sector gubernamental, la comisión política de la marcha pidió un debate directo con el presidente Morales, pero la presencia del mandatario se descartó ayer mediante una carta enviada por el Ejecutivo. Tras ello, la dirigencia aseguró que los “ministros” se escaparon del diálogo y se reanudaría la marcha.
Actualmente el equipo ministerial –conformado por los ministros José Luis Gutiérrez, (Hidrocarburos y Energía), Carlos Romero (Ministro de la Presidencia) y Nilda Copa (Justicia)– continúa en San Borja (Beni), lugar donde se encuentran los marchistas indígenas.
Luego de que se anunciara la continuidad de la marcha, un contingente de policías se trasladó hasta Yucumo para evitar situaciones de violencia. En esa localidad, colonizadores de sindicatos afines al Movimiento Al Socialismo (MAS) instalaron un bloqueo de caminos con el propósito de obligar a los indígenas a dialogar con el Gobierno.
El ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, sostuvo que se comunicaron con pobladores de esa región para que depongan actitudes beligerantes. Agregó que es responsabilidad del Gobierno evitar la generación de más violencia, al señalar que existirían otros puntos de bloqueos en Quiquibey, Rurrenabaque, Palos Blancos, Sapecho, Caranavi y Nor Yungas.
“No queremos generar mayor violencia y por eso insistiremos que este problema tiene que resolverse a través del diálogo rápidamente. Por supuesto, en el marco de nuestras obligaciones legales nosotros haremos todo lo que esté a nuestro alcance para evitar que haya violencia”, sostuvo Llorenti.
Por su parte, la vicepresidenta de la Central de Pueblos Étnicos Mojeños del Beni CEPEM – B, Miriam Yubanure, dijo que la columna de marchistas pasará de manera pacífica el bloqueo. “Vamos a pasar, no tenemos nada que ver con ellos”, dijo. Se prevé que la marcha llegue hasta ese sector en dos o tres días aproximadamente.
El dirigente del Consejo Nacional de Ayllus y Marcas de Qullasuyu (Conamaq), Rafael Quispe, aseveró que la movilización es pacífica, que no están en contra de ningún sector y que el bloqueo corta la libre transitabilidad. Para no llegar a la confrontación, se analizan mecanismos como caminar “por el monte” u otras vías.
Otro sector que apoya al Ejecutivo y cuestiona la actitud de los indígenas son los campesinos. El secretario ejecutivo de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), Roberto Coraite, afirmó que la carretera por el Tipnis mejorara la calidad de vida del sector. “No queremos que los indígenas vivan más como salvajes”, dijo.
Consulta generalizada
El presidente Evo Morales, manifestó este lunes que la consulta previa, para la construcción del segundo tramo de la carretera, se realizará a todos los habitantes del Parque Isiboro Sécure y en presencia de veedores internacionales para garantizar su transparencia. Cuestionó la posición indígena que rechaza la inclusión de colonos y cocaleros en la consulta.
“Desde las próximas semanas el gobierno nacional va hacer la consulta correspondiente respetando las normas internacionales y las leyes nacionales, y que la gente que vive ahí que diga si quiere o no camino, además vamos a invitar a los organismos internacionales para que sean veedores y acompañen las consultas”, sostuvo.
El primer mandatario dijo que colonos asentados en el parque, en los años 70 y 80, tienen derecho a participar de la consulta porque “ellos son los grandes defensores del territorio indígena al no permitir que se establezcan nuevos asentamientos desde inicio de los 90″.
El domingo pasado, Adolfo Chávez, presidente de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB) señaló que la consulta debe ser destinada a los indígenas oriundos del lugar y no a colonos que sólo tienen interés en la expansión y apropiación del territorio del parque.
(Servindi, 07/09/2011)