Ayer la Comisión Europea hizo pública una comunicación para garantizar la conservación de la diversidad biológica más allá del 2010, con 4 posibles objetivos que difieren principalmente en su grado de ambición. En el Año Internacional de la Biodiversidad, WWF insta a la UE a liderar las acciones para preservar el patrimonio natural europeo y mundial, estableciendo una meta firme, clara y medible.
La acelerada desaparición de la fauna y flora es un problema global que, al igual que el cambio climático, no tiene fronteras. La Comisión Europea reconoce que “el capital natural del mundo permanece bajo una grave amenaza”, y que “junto con el cambio climático, la pérdida biodiversidad es la amenaza medioambiental más crítica, dando lugar a importantes daños económicos y de bienestar”. Sin embargo y pese a estas afirmaciones, en la propia Comisión todavía se duda en adoptar una posición firme.
La pérdida de biodiversidad y el cambio climático son dos caras de una misma moneda y resolver uno sin el otro no tiene sentido, ya que ambos deben ser abordados conjuntamente. La conservación de nuestra riqueza debe situarse en lo más alto de la agenda política de la UE. Si la tendencia actual de destrucción de la naturaleza continua, Europa afrontará unos gastos de alrededor de 1,1 billones de euros al año en 2050, casi el 4% del PIB de la UE ¹.
Hoy en día se produce una disminución de las especies entre 100 y 1.000 veces mas rápido que la tasa normal2, lo que no nos deja ni tiempo ni espacio para alternativas y para palabras ambiguas. Europa debe demostrar el más alto nivel de ambición y de responsabilidad en la conservación de nuestro capital natural, con el fin de garantizar beneficios sociales y económicos para las generaciones futuras.
Según afirma Andreas Baumüller, Técnico de Biodiversidad en la Oficina de Política Europea de WWF: “La mejor de las opciones presentadas sería la 4, según la cual es necesario detener la pérdida de la biodiversidad y restaurar los servicios que nos ofrece el medio ambiente en la UE, pero no “en la medida de lo posible” como expresa el comunicado, sino de forma absoluta, para 2020".
Por ello, WWF solicita a la Presidencia Española que apoye la adopción del objetivo 4 del documento de la Comisión, incluyendo la retirada de cualquier expresión ambigua cómo "en la medida de lo posible”, y que lidere a la Unión Europea hacia una política de la conservación que incluya:
* Un objetivo de diversidad biológica, con sus correspondientes metas específicas, que sea ambicioso y medible en los distintos ámbitos de política (por ejemplo pesca, bosques y aguas continentales), con indicadores claros que midan y aseguren que los objetivos son alcanzados.
* Más fondos directos para la conservación de la naturaleza y para la protección y gestión de los espacios terrestres y marinos de los espacios de la red Natura 2000.
* La adecuada integración de la biodiversidad en todas las diferentes políticas sectoriales (como por ejemplo la energía y el clima).
WWF pide a la Comisión Europea que proponga un conjunto claro de indicadores a los Jefes de Estado en Marzo, e insta a que solamente sea adoptado el objetivo más ambicioso.
(Ecoticias.com, 20/01/2010)