El Zoológico Nacional construirá un hábitat especial para los tigres blancos, debido a la ampliación de la familia: Luna y Pampa desde fines de diciembre tienen cinco cachorros, que por ahora están en una jaula con su madre
Mauricio Fabry, director del Zoológico Nacional, anticipó que el nuevo recinto de los tigres blancos "será sin rejas y permitirá que los visitantes puedan ver a estos hermosos ejemplares en medio de explanadas de pasto y algunas cascadas".
Los cinco tigres bebés nacieron el 28 de diciembre y el miércoles fueron sometidos a su primer control y se les introdujo un microchip subcutáneo para identificarlos. Los cachorros permanecerán con su madre Luna durante todo el periodo de amamantamiento, que se prolonga por unos cinco meses.
Luna llegó de México en 2004 y el orgulloso padre, Pampa, arribó desde Argentina en mayo de 2007.
Fabry destacó que "este nacimiento da prueba de que las políticas de reproducción están dando resultados. Estos son los primeros cinco tigres blancos que nacen en el zoológico en 82 años de historia", dijo en alusión a la cantidad.
Luna tuvo otros tres hijos en diciembre de 2007, que es lo habitual en esta especie. Explicó que la reproducción de tigres blancos en cautiverio "no es tarea fácil", porque no hay más de 200 ejemplares en todo el planeta y porque "los tigres son animales solitarios".
Las parejas de tigres en cautiverio pueden tener entre una y seis crías, que nacen pesando entre un kilo y un kilo y medio, las que dependen absolutamente de su madre durante su primer mes de vida. El tigre blanco es muy raro y su color es producto de un gen mutante, no de albinismo, y el tigre de Siberia y el de Bengala son las únicas especies que presentan la alteración genética.
El tigre blanco es un animal exótico en peligro de desaparecer de la tierra, porque son escasos y son cazados furtivamente.
(AP / Planeta Azul, 09/01/2010)