El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, reforzó hoy su pedido de que se establezca un impuesto al dióxido de carbono (CO2) a nivel de la Unión Europea y se impongan aranceles punitivos para proteger el clima. "No aceptaremos importar productos de países que no tengan estándares medioambientales como los nuestros", dijo Sarkozy en la localidad de Cholet, en el oeste de Francia.
"En el futuro cobraremos en las fronteras europeas un impuesto al clima", añadió. Sarkozy busca evitar que haya "eco-dumping". El presidente francés subrayó que el impuesto al clima en su país, en una versión modificada, entrará en vigor en julio. La Corte Constitucional invalidó poco antes de fin de año una ley de impuesto al CO2, bajo el argumento de que contenía muchas excepeciones.
El gobierno de Francia busca reducir el consumo de combustibles fósiles y, por lo tanto, la emisión de gases de efecto invernadero, a través de un impuesto al CO2. A cambio, los hogares pagarán menos impuestos a los ingresos.
(Dw-world.de / Ecoticias.com, 07/01/2010)