Más de cien casas alrededor de la Mina Marlin han sufrido daños desde el inicio de la actividad minera en las municipalidades de Sipacapa y San Miguel Ixtahuacán. Todo indica que las voladuras y el transporte pesado de la mina han causado grietas y rajaduras en las viviendas, según un informe técnico de ingenieros estadounidenses de UUSC y la Comisión Pastoral Paz y Ecología de la Diócesis de San Marcos.

Desde la instalación de la Mina Marlin en 2005, varias familias en San Miguel Ixtahuacán que viven cerca del tajo abierto han denunciado daños a sus casas. Más de 100 casas de block y adobe tienen rajaduras y grietas en las paredes, pequeñas y grandes, del suelo al techo. En el 2007, COPAE, una comisión técnica de la Diócesis de San Marcos, guiada por Monseñor Álvaro Ramazzini, pidió apoyo al Unitarian Universalist Service Committee (UUSC) de Massachussets (EE.UU), para investigar las causas. UUSC es una organización que trabaja en monitorear derechos humanos en diversas partes del mundo.

Durante dos años, un equipo de ingenieros calificados (en minas, estructurales, civiles y geotécnicos),  ha estado monitoreando las rajaduras en 33 casas alrededor del proyecto minero de Montana Exploradora, subsidiaria de la empresa Canadiense Goldcorp Inc. Hoy presentan un informe claro y conciso, describiendo los procedimientos de investigación.

El informe es titulado 'CASAS RAJADAS ALREDEDOR DE LA MINA MARLIN: Investigación y Análisis Preliminares de Daños a las Casas en las Aldeas de Agel, El Salitre, San José Ixcaniche y San José Nueva Esperanza, Municipios San Miguel Ixtahuacán y Sipacapa, Departamento de San Marcos, Guatemala.'

Voladura y transporte pesado
Teresa Fuentes, del eje jurídico de COPAE explica: “El equipo de ingenieros monitoreó casas en aldeas lejanas de la mina, en las aldeas de Escupija y Chininguitz. Se descubrió que no tienen signos de rajaduras y grietas como las observadas en las casas cerca de la mina.”

El ingeniero Robert Robinson de UUSC: “Se descartó la posibilidad de daños causados por deslizamientos, terremotos, hundimientos, agua superficial o subterranea, así como hinchamiento por suelos arcillosos. Tampoco una inadecuada construcción de las casas, es una causa probable según nuestros estudios. Nuestro equipo de ingeniería eliminó todas las posibles causas realistas menos una.”

“Investigando las vibraciones de la tierra, causadas por la voladura y el transporte pesado de la mina, nos dimos cuenta de la relación significativa entre los dos. Las rajaduras sobre todo se producen en las paredes orientadas hacia las fuentes de vibraciones. Las casas de block y adobe no están construidas para resistir este impacto.”

Montana Exploradora responsable
El ingeniero Robert Robinson de UUSC afirma: “Montana Exploradora no hizo una inspección previa de las casas cercanas al tajo abierto, al inicio de operaciones. Por eso, no puede refutar las afirmaciones de los propietarios quienes afirman que las rajaduras se formaron después de que la mina empezó sus actividades.”

“Las investigaciones nos demuestran que la actividad minera es la causa más probable para las casas rajadas. Por lo tanto, Montana Exploradora es responsable de la reparación y restauración de las casas a su condición original. Además, deben de modificar sus procedimientos de operación para prevenir cualquier daño futuro.”

“Sus procedimientos son generalmente acceptables. Sin embargo, en el tema de las rajaduras, son inaceptables debido a la cercanía de las comunidades alrededor de la mina y al tipo de construcción de las casas.” COPAE y UUSC recomiendan fuertemente el monitoreo adicional, en particular porque la empresa minera ha comenzado la explotación minera en un nuevo tajo a cielo abierto que se encuentra mucho más cercano a partes de las aldeas afectadas.

(Comisión Pastoral Paz y Ecología de la Diócesis de San Marcos / Mines and Communities, 23/11/2009)