El carozo del coco babasú (Orbignya phalerata martins), una palmera típica del norte y nordeste de Brasil, sustituirá 17 millones de toneladas de carbón mineral de centrales termoeléctricas de Alemania hasta 2015.
El proyecto de exportación, que comenzará en marzo, dará trabajo a 8.000 mujeres brasileñas, que rompen el coco a fin de aprovechar la nuez, generando 500 nuevos empleos directos, a un costo de 26 millones de dólares.
La fibrosa cáscara de este fruto, desechado en su mayor parte, “sirve para artesanía, y el mesocarpio (parte intermedia) es rico en almidón y puede usarse para alimentación humana”, dijo a Tierramérica Adeilton Pereira Maciel, investigador del babasú en la Universidad Federal de Maranhão.
En total, el babasú ocupa a 400.000 mujeres rompedoras de coco en el país, y genera numerosos subproductos, como aceite, biocombustible, harina, jabón y cosméticos.
(Tierramérica / Planeta Azul, 16/11/2009)