La empresa papelera finlandesa UPM ha reaccionado y ha suspendido sus importaciones de pasta de papel procedentes de la zona
Los activistas españoles que participaron en una acción de denuncia contra la destrucción de bosques tropicales en Sumatra (1) se encuentran en dependencias de la policía de inmigración de Indonesia a la espera de ser deportados junto con el resto de compañeros extranjeros que participaron en esta acción pacífica.
Mejor ha reaccionado UPM-Kymmene, la mayor empresa papelera del mundo, que ha anunciado que dejará de comprar pasta de papel a la empresa Asia Pacific Resources International Holding Limited (APRIL), uno de los fabricantes de papel de la zona responsables de la destrucción de los bosques tropicales de Indonesia.
Los activistas detenidos son el coruñés Pablo Méndez López y el madrileño Jesús Roller Fernández, ambos activistas por el clima de Greenpeace y miembros del Campamento de Defensa de los Bosques instalado por la organización ecologista en la península de Kampar, al oeste de la isla de Sumatra, para denunciar la tala de los bosques y su drenaje para implantar plantaciones de palma de aceite y acacias destinadas a la fabricación de papel.
“Pablo y Jesús han intentado evitar la destrucción de los bosques y el caos climático” ha declarado Miguel Ángel Soto, responsable de la Campaña de Bosques y Clima de Greenpeace España, “y por ello deberían respaldados por los Gobiernos español y de Indonesia en lugar de ser detenidos y deportados”
UPM-Kymmene, que suministra papel de oficina a buena parte del mercado internacional, incluidos Europa, EE.UU., China y Australia, ha admitido que la pasta de papel de APRIL “procede de un medio ambiente muy delicado” y ha decidido suspender sus contratos con esta empresa. Greenpeace estima que esta cancelación suponen el 4% de toda la producción de pasta de APRIL, y unas pérdidas para la empresa de indonesia de 55 millones de dólares anuales. (2)
“Esta decisión de UPM supone una gran ayuda para la conservación de los bosques y turberas de Indonesia, cuya destrucción esta produciendo un agravamiento del cambio climático, la extinción masiva de biodiversidad y agudizando la situación de pobreza de las comunidades rurales dependientes de los bosques” ha declarado Miguel Ángel Soto, responsable de la campaña de Bosques y Clima de Greenpeace España.
A principios de la semana, Greenpeace mostraba las recientes evidencias, apoyadas en imágenes aéreas, que prueban cómo la empresa APRIL está destruyendo y drenando bosques de turbera en la península de Kampar, en la isla indonesia de Sumatra. Los datos confirman que la compañía destruye bosques de turberas con una profundidad superior a tres metros, lo que es ilegal según la legislación indonesia.
Un millón de hectáreas de bosque, en su mayoría selva tropical se destruye cada mes, lo que se traduce en un campo de fútbol cada dos segundos. La destrucción de los bosques tropicales y de los bosques de turbera en Indonesia emiten cantidades enormes de CO2, situando a Indonesia como el tercer país emisor de gases de efecto invernadero después de China y Estados Unidos.
Notas
(1) http://www.greenpeace.org/espana/news/091112-01
(2) La empresa APRIL produce cerca de 2,4 millones de toneladas de pasta cada año (Informe RSC 2008 de APRIL). En 2008, la fábrica de pasta de Changsu de UPM en China importó cerca de 105.000 toneladas de pasta procedente de Indonesia (datos de aduanas de China), la mayor parte fue suministrada por la fábrica de pasta RAPP perteneciente a APRIL y equivalente a más del 4% de la producción anual global de pulpa de APRIL. El precio medio de exportación de pulpa indonesia era de 537 dólares americanos. (según datos de las aduanas indonesias)
(Greenpeace Espanha, 13/11/2009)