Venezuela adelanta hoy un programa integral de desarrollo de la Faja Petrolífera del Orinoco que incluye el impulso de otras actividades productivas y planes sociales a la sombra de las torres de extracción. La perspectiva, adelantada esta semana por el presidente Hugo Chávez apunta a evitar la repetición de planes similares en el pasado que terminaron con villas miseria alrededor de los grandes centros económicos como Maracaibo o Ciudad Guayana.
La proyección de Chávez es construir ciudades ecológicas y no contaminantes en la región de 55 mil 314 kilómetros para no depender sólo del trabajo en los campos petroleros y acorde con el enfoque social que caracteriza su gobierno.
Aunque se trata sólo de una proyección hasta el momento, la idea apunta al establecimiento de un ente regional, que unificaría los proyectos en la región sobre la cual tienen derechos administrativos los estados Guárico, Anzoátegui y Monagas. La propuesta incluye un enfoque inverso al de Ciudad Guayana, fundada a orillas del Orinoco en 1961 y planificada como centro industrial de la Corporación Venezolana de Guayana, especializada en minería.
La planificación de entonces se centró en el potencial económico de minerales y producción de bauxita hierro, aluminio, acero, oro y diamantes, plantas de concentración de mineral de hierro, fundición de acero y procesadoras de bauxita y alúmina, entre otras obras. El resultado aquí, como en otros proyectos similares, fueron los cinturones de miseria alrededor de la riqueza, para cuya explotación tampoco se pensó mucho en la afectación del medio ambiente o la sustentabilidad.
La propuesta de Chávez para la Faja del Orinoco, sin embargo, es construir ciudades "que den el pecho y no la espalda al río" conjuntamente con el desarrollo de la pesca, la recuperación de tierras para la agricultura y otras actividades. La filosofía de este enfoque es el mismo declarado por el gobierno venezolano: seguir desarrollando la principal fuente de divisas, el petróleo, pero diversificar la economía para dejar de ser petro-dependientes y garantizar la seguridad alimentaria.
El contexto de esta proyección es la llamada Siembra Petrolera que básicamente consiste en utilizar los recursos por la venta de hidrocarburos para el desarrollo industrial y social, además de la expansión del propio sector de hidrocarburos. Con una producción de tres millones de barriles diarios, Venezuela es hoy quinto exportador mundial de crudos y va camino a convertirse en 2010 en el primer reservorio mundial con la certificación de 316 mil millones de barriles.
Venezuela ha certificado hasta hoy 172 mil millones de barriles de crudo para ocupar el segundo lugar mundial detrás de Arabia Saudita con algo más de 264 mil millones de barriles, por delante de Irán con 138,4 mil millones de barriles. De la reserva venezolana, corresponden a la Faja del Orinoco 234 mil millones de barriles que atraen a inversionistas de todo el mundo, encabezados por Rusia con 20 mil millones de dólares y China con 16 mil millones de dólares.
Otras firmas presentes en la faja son la British Petroleum (Gran Bretaña, Repsol (España), ENI (Italia), Statoil (Noruega), junto a empresas de otros países. Para su explotación, que hoy abarca 18 mil 220 kilómetros cuadrados, la zona fue dividida en cuatro áreas: Boyacá, Junín, Ayacucho y Carabobo, segmentados en 27 bloques de 500 kilómetros cuadrados cada uno aproximadamente.
(Por Miguel Lozano, EcoPortal, 20/09/2009)