La fuga en un oleoducto entre Francia y Alemania provocó sábado (08/08) el vertido de unos 4.000 metros cúbicos de petróleo en la reserva natural de Saint-Martin-de-Crau, en el sureste de Francia, según informó el Ministerio de Medio Ambiente de ese país. El crudo se ha expandido por una superficie de unas dos hectáreas en Marsella. Y la secretaria de Estado francesa para asuntos ecológicos, Chantal Jouanno, calificó lo sucedido de catástrofe medioambiental.
En el área de la reserva natural de Coussouls de Crau, al noreste de la ciudad portuaria, viven varias especies de pájaros poco habituales. Expertos medioambientales temen que el incidente cause considerables daños a esa fauna. Aún no se conoce con exactitud cómo tuvo lugar la pérdida en el oleoducto de 769 kilómetros de longitud de la compañía Société du Pieline Sud-Européen (SPSE), cuyo socio mayoritario es de la multinacional francesa Total.
Las primeras investigaciones apuntan a la fuga de unos 4.000 metros cúbicos de crudo, que sin embargo no habrían contaminado las fuentes de agua subterráneas. "La situación está bajo control, no hay peligro para los pueblos aledaños", dijo al diario La Provence François Trabucco, director de SPSE, y anunció que el área será limpiada en los próximos días por especialistas. La fuga fue descubierta el viernes.
La empresa abastece con los ductos a varias refinerías y a una plataforma petroquímica. La ruta parte de Fos-sur-Mer en Francia y pasa por Suiza para llegar hasta Karlsruhe, en Alemania. SPSE transporta actualmente unos 23 millones de toneladas de crudo al año, según informó la compañía.
(Clarín, 09/08/2009)