Un estudio del referido ministerio peruano, presentado hoy (25/07) en el taller Diálogo Interministerial sobre Cambio Climático, calculó que esas medidas necesitan de un presupuesto de entre 200 y 300 millones de dólares para la conservación de 55 millones de hectáreas de bosques. El Director General de Cambio Climático, Desertificación y Recursos Hídricos del ministerio peruano, Eduardo Durand, declaró que "es necesario desarrollar estrategias de adaptación relacionadas con el uso de la tierra, cambios en calendarios productivos, tecnología de riego y otras acciones en el sector agua".
Por su parte, la viceministra de Desarrollo Estratégico de los Recursos Naturales, Vanessa Vereau, dijo que Perú es especialmente vulnerable al cambio climático porque su economía, basada en el agro, depende directamente del clima y sus alteraciones. Vereau reveló que el ministerio ha diseñado una propuesta para crear un fondo financiero derivado del impuesto al combustible fósil para llevarla a la XV Cumbre Mundial de Cambio Climático de Copenhague, y así poder contar con recursos para implementar medidas de adaptación y conservación de bosques.
El ministerio ha propuesto para conservar 55 millones de hectáreas de bosques tropicales -de un total nacional de 66 millones de hectáreas- por medio de la creación del programa Conservemos Juntos, a través del cual se compensará a las comunidades nativas con un pago anual de diez soles (3,34 dólares) por hectárea de bosque conservada. También ha planteado una compensación por servicios ambientales que consistirán en la conservación de la biodiversidad y de fuentes de agua, el secuestro de carbono y la conservación de paisajes.
De acuerdo con informes internacionales citados por el ministerio del Ambiente, la productividad de la agricultura retrocederá entre 10 y 20 por ciento durante el próximo siglo, lo cual ocasionaría una mayor inseguridad alimentaria. Asimismo, el 81 por ciento de la producción agrícola de los ocho cultivos alimentarios principales de Perú -entre ellos la oca, la quinua, las habas y algunas variedades de la papa- podrían desaparecer por efectos de este fenómeno global.
El Diálogo Interministerial sobre Cambio Climático resaltó la necesidad de inversión pública para desarrollar proyectos de adaptación, incentivar una cultura hídrica, generar una arquitectura jurídica adecuada y promover institucionalidad involucrando a los actores.
(Efe / Planeta Azul, 25/07/2009)