El grupo petrolero Exxon Mobil fue condenado por un tribunal federal de apelaciones a pagar 507.5 millones de dólares en daños y perjuicios a pescadores, empresarios y nativos de Alaska, Estados Unidos, afectados por el vertido del buque Exxon Valdez. El tribunal de apelaciones número nueve con sede en San Francisco anunció hoy esta decisión, que confirma una sentencia anterior de la Corte Suprema el pasado año.
Además, el tribunal impuso a Exxon Mobil el pago de intereses a los demandantes por valor del 5.9 por ciento de la cantidad inicialmente concedida en un juicio de 1996. Exxon Mobil fue condenado ese año a pagar cinco mil millones de dólares en concepto de daños y perjuicios a los afectados por la catástrofe ecológica, pero esta suma fue reducida posteriormente en repetidas apelaciones judiciales. Ni los abogados de los demandantes ni los portavoces de Exxon Mobil han realizado por el momento declaraciones sobre la decisión.
El 24 de marzo de 1989, el petrolero Exxon Valdez encalló en la bahía Prince William Sound de Alaska, derramando 37 mil toneladas de hidrocarburo en el agua y provocando una tragedia ecológica cuyas consecuencias aún siguen estudiándose. En total, el petróleo vertido afectó a mil 900 kilómetros (mil 200 millas) de la costa de Alaska y se calcula que los gastos de limpieza ascendieron a dos mil 500 millones de dólares. El derrame fue el más grave en la historia de Estados Unidos y produjo un cambio en la legislación medioambiental que dio lugar al Oil Pollution Act de 1990.
(EFE / Planeta Azul, 16/06/2009)