El magistrado Tristán Martínez, juez provincial, prohibió fumigar con cualquier tipo de agroquímicos en un radio de 800 metros de la zona urbana cuando se realiza de forma terrestre, y de 1.500 metros cuando sea por vía aérea.Tristán Martínez es juez civil, comercial y laboral de San Jorge que hizo lugar a la acción de amparo presentada por vecinos de esa ciudad. La medida fue adoptada luego que una nena de un año resultara gravemente afectada en su salud después de recibir la lluvia de agroquímicos cuando pasó una avioneta. Uno de los más claros preceptos cuando se trata de salud pública es que ante la mínima duda se debe eliminar la probable causa del daño que se observa sobre la salud humana, hasta tanto se demuestre la inocuidad del producto del que se tiene sospecha. De ninguna manera las corporaciones proveedoras pueden exigir que primero se demuestre la peligrosidad del veneno mientras lo seguimos utilizando.
El Dr. Oscar Scremin, Neurofisiólogo argentino que trabaja en la Universidad de California, sostiene que el principal problema del glifosato está en los elementos que complementan su fórmula. Distintas fórmulas de presentación del producto contienen: surfactante POEA, que le facilita la penetración en las plantas, Isopropilamina, Sulfato de Amonio, Isobutano, Metil Pirrolidinona, Hidróxido de Potasio y otros.
Todos son productos que generan reacciones y toxicidades desde alérgicas hasta intoxicaciones graves, que incluso pueden provocar la muerte de las personas. Estas combinaciones del glifosato con esas sustancias son tres veces más peligrosas que el glifosato puro.
(La Opinión / Bahianoticias.com, 14/06/2009)