Con motivo del Día Mundial del Ambiente, la congresista nacionalista Juana Huancahuari alertó sobre la acción depredadora que generan las empesas extractivas en diversas zonas ecológicas. El país tiene varias zonas ecológicas, especialmente las boscosas, expuestas a la extinción, ya sea por la contaminación de ríos, la deforestación, la extracción y sobre explotación de hidrocarburos, de minerales, y últimamente la producción de biocombustibles”, señaló.
Asimismo, afirmó que “aunque parezca paradójico, varias áreas, supuestamente protegidas en el Perú, son las más expuestas a un quiebre de su condición ambiental”. La congresista responsabilizó al gobierno de exponer la diversidad natural a la “voracidad de las trasnacionales”. “En el Perú antiguo existían 96 zonas naturales de vida. En la actualidad el país posee 84 zonas de vida natural de las 104 que existen en el mundo”, señaló.
Huancahuari resaltó el peligro que afronta el medio ambiente con el desarrollo de los biocombustibles, al traer como consecuencia la deforestación, la pérdida de la biodiversidad por los cambios en el uso del suelo para el establecimiento de grandes extensiones de monocultivos. Del mismo modo, cuestionó el aparente aporte de los biocombustibles en la mitigación del problema del cambio climático, ya que los balances de gases de efecto invernadero y energía de los biocombustibles dependen del cultivo y sistema de producción utilizado.
En el Perú, más de 17 millones de hectáreas se encuentran concesionadas a las empresas mineras, 45 millones de hectáreas a los contratos petroleros y casi 8 millones de hectáreas son concesiones forestales.
(Servindi, 04/06/2009)