Greenpeace ha denunciado hoy públicamente que el Estado Español no cumple sus compromisos con el Convenio CITES, el mayor acuerdo internacional sobre comercio de especies amenazadas de fauna y flora silvestres que persigue preservar la conservación de las especies mediante el control de su comercio. Por este motivo, el pasado día 20 de marzo, en vísperas del día Forestal Mundial, Greenpeace España envió una queja formal a la Comisión Europea contra el Estado Español.
La denuncia se hace pública hoy coincidiendo con la presentación del informe "Comercio Ilegal de maderas y aplicación del Convenio CITES en España", (1) que ha tenido lugar en el transcurso del VII Congreso Nacional de Derecho Ambiental en Tarragona (2), donde Greenpeace ha presentado a los abogados ambientalistas y fiscales de medio ambiente presentes las razones y argumentos de la queja ante la Comisión.
El informe recopila varios casos de importación y/o posesión irregular de maderas de especies amenazadas incluidas en el Convenio CITES. Estos presuntos delitos cometidos entre entre 2002 y 2006 son en buena parte resultado de operaciones "Palo" (2002-2005) y "Tarima" (2006) del SEPRONA y la UCO de la Guardia Civil, que supusieron la apertura de diligencias y causas judiciales en diversos juzgados.
Greenpeace España, se presentó como acusación popular en los procedimientos abiertos, he intentó que los hechos fueran sancionados, aunque todas las causas, menos una, fueron archivadas, lo que pone de manifiesto las graves carencias del sistema de control, así como la descoordinación entre las diferentes autoridades implicadas y la inacción de las mismas.
"El mensaje que el Departamento de Aduanas, la Autoridad Administrativa y la fiscalía están mandado al sector de la madera es que el delito de contrabando no se persigue en España" ha señalado José Manuel Marraco Espinós, abogado de Greenpeace y coordinador del informe. "Para Greenpeace, tras más de cinco años de intentar que se cumpla el régimen sancionador del Convenio CITES, a quedado claro que el actual sistema de aplicación, las responsabilidades de las diferentes autoridades implicadas y, en especial, la potestad sancionadora, han fallado estrepitosamente", ha añadido Marraco.
El informe revela que algunas empresas del sector de la madera han estado introduciendo en España maderas protegidas en el Convenio CITES utilizando otros nombres de maderas parecidas. Como ejemplo, según recogen los informes de la Autoridad Administrativa CITES en España (3), entre los años 2003 y 2006 la Guardia Civil intervino más de 55 toneladas de madera de palosanto de río, una especie en peligro de extinción procedente América del Sur y cuyo comercio está prohibido. El palo santo de río se introducía en España bajo los nombres de caviuna, jacaranda o pitomba. Algo similar ocurría con la caoba de hoja ancha, que se encubría como cedro
En cada uno de los casos, abogados ambientalistas expertos en el Convenio CITES han realizado un análisis jurídico-criminal para explicar los incumplimientos concretos de la legislación CITES. También, se han señalado los fallos en la cadena de responsabilidades en estos incumplimientos, apareciendo diversas actuaciones jurídicamente imputables en el Departamento de Aduanas y la Autoridad Administrativa CITES. Por último, y a la luz de la experiencia de estos cinco años, Greenpeace expone las causas de la ineficacia en la aplicación del Convenio CITES en España.
"La queja ante la Comisión Europea es la última opción que teníamos para obligar a las autoridades españolas a cumplir el Convenio CITES", ha apuntado Miguel Ángel Soto, responsable de la Campaña de Bosques de Greenpeace. "Tras numerosas reuniones con la Autoridad Administrativa y diversas denuncias a la fiscalía de medio ambiente, el resultado siempre ha sido el mismo: no hay penas ni sanciones a las empresas implicadas en contrabando o tráfico ilícito de especies incluidas en el Convenio CITES", ha concluido Soto.
Antes de finales de año, la comunidad internacional espera alcanzar un nuevo acuerdo sobre el clima en Copenhague, el cual abordará la reducción de la deforestación, origen del 20% de los gases de efecto invernadero, para lo que las instituciones europeas ya se están preparando (4). España tendrá una magnífica oportunidad para recuperar su credibilidad en los foros internacionales haciendo cumplir el Convenio CITES, una herramienta útil para combatir la degradación forestal y el cambio climático.
Notas:
(1) El informe "Comercio Ilegal de maderas y aplicación del Convenio CITES en España. Análisis de cinco casos de tráfico ilícito de especies maderables incluidas en el Convenio CITES" está disponble en http://www.greenpeace.org/espana/reports/090423
(2) El Congreso está organizado por la Asociación de Derecho Ambiental Español.
http://www.derechoambiental.net/congreso7/
(3) http://www.cites.org/esp/resources/reports/biennial.shtml
(4) http://www.greenpeace.org/espana/news/090422
(Ecoportal, 25/04/2009)