Actualmente en Chile no se cuenta con los mecanismos legales que aseguren la conservación de las poblaciones de cetáceos y el desarrollo sustentable de las comunidades costeras mediante el turismo de avistaje de cetáceos. Esta actividad ecoturística adquiere mayor importancia en las economías de América Latina, presentando una tasa de crecimiento del 11,3% anual.

Este martes 02 septiembre se votará en sala de la Cámara Alta el proyecto de ley que declara a las aguas jurisdiccionales chilenas como Zona Libre de Caza de Cetáceos y genera el marco legal para garantizar la conservación de estas especies, el cual fue aprobado en general el 20 de agosto pasado por la Comisión de Intereses Marítimos, Pesca y Acuicultura y posteriormente despachado a Sala.

Actualmente en Chile no se cuenta con los mecanismos legales que aseguren la conservación de las poblaciones de cetáceos y el desarrollo sustentable de las comunidades costeras mediante el turismo de avistaje de cetáceos. Esta actividad ecoturística adquiere mayor importancia en las economías de América Latina, presentando una tasa de crecimiento del 11,3% anual.

Paradójicamente Chile es el segundo país con mayor tasa de crecimiento, desarrollándose esta actividades de manera no regulada en Punta de Choros y Magallanes y circunstancialmente en Arica e Isla de Chiloé. Al no ser posible certificar el número de embarcaciones que desarrollan actividades de turismo de observación, no es posible asegurar tanto la conservación de los cetáceos como el desarrollo sustentable de las comunidades costeras locales. A modo de ejemplo, en la región de Magallanes, se ha aumentado de una embarcación en el año 2003 a cinco, producto de la falta de un reglamento. Esto pese a que el sector de actividades es un área marina protegida.

Comentarios sobre Potenciales Indicaciones al Proyecto de Ley
El proyecto de ley no puede constituir una “segunda ley del bosque nativo”, demorándose indefinidamente en el Senado de la Nación, ya que las actividades de observación de cetáceos están aumentando de manera exponencial y las autoridades no tienen potestad ni cuentan con un instrumento para regularla. En forma análoga lo mismo está sucediendo con la protección de hábitats críticos que permitan asegurar realmente la conservación de las diversas poblaciones de cetáceos en aguas chilenas.

Respecto de las indicaciones a las que el Senador Horvath hizo referencia durante la última sesión de la Comisión de Pesca, se incluyen: a) La obligación de informar el avistamiento de cetáceos en aguas jurisdiccionales y en el Mar Presencial; b) La designación de los organismos competentes en el Proyecto de Ley y c) La asignación de fondos de parte del Ejecutivo.

Si bien estas indicaciones son positivas, señalamos que los recursos financieros debieran estar contemplados en el Proyecto de Ley que crea el Ministerio de Medio Ambiente como un Fondo de Conservación de Biodiversidad en general, y no en este Proyecto de Ley de conservación de cetáceos en particular.

A su vez, el registro de avistamiento de cetáceos de manera voluntaria se encuentra funcionando desde hace más de cinco años de manera eficiente y de forma que garantiza el acceso de los diversos actores interesados a través de la Red de Avistamiento de Mamíferos Marinos de Chile del Centro de Conservación Cetacea (CCC) y de la Red de Avistamiento de la Armada de Chile. Por medio de estos sistemas voluntarios de registro de avistamiento, no resulta necesario realizar modificaciones a la Ley de Navegación para que ello sea mandatorio, lo cual incluso podría tener efectos contraproducentes, pues el no reportar los avistamientos por diferentes razones podría significar la amonestación de parte de la autoridad, disminuyendo la empatía e involucramiento de los navegantes con la conservación de los cetáceos.

Es importante destacar que el Proyecto de Ley firmado por el Ejecutivo y que se encuentra en su último trámite constitucional, incluye los aspectos fundamentales para que las autoridades elaboren los reglamentos y planes de acción necesarios para asegurar la conservación de los cetáceos y el desarrollo sustentable de las comunidades costeras en regiones.

La necesidad de legislar urgentemente a favor de la conservación y el uso no letal de las diversas poblaciones de cetáceos en aguas chilenas cuenta con un absoluto consenso de la ciudadanía, constituyendo una de las pocas causas que generan unidad nacional donde se encuentra la conservación ambiental articulada con la defensa soberana de los intereses de la Nación. Este histórico y sin precedentes consenso está respaldado por los resultados de la encuesta Adimark GfK/CCC que señaló que el 99% de los ciudadanos chilenos considera fundamental la creación de leyes en esta materia. Asimismo es importante recordar que esta iniciativa cuenta con el apoyo del Gobierno, la Armada de Chile, la Cámara de Diputados y es altamente valorada por los científicos, conservacionistas y la comunidad internacional.

El insistir en incorporar indicaciones al Proyecto de Ley podría demorar su aprobación de manera indefinida. Es por ello que es pertinente volver a recordar la experiencia vivida con la Ley de Bosque Nativo, la cual demoró diez años en ser aprobada, consecuencia de sucesivas indicaciones y enmiendas, mientras las actividades forestales no reguladas continuaron operando y destruyendo nuestra biodiversidad terrestre y acuática.

Como ciudadanos organizados hacemos un llamado a los Senadores de la República a adoptar de manera consensuada el no realizar indicaciones y poder aprobar este proyecto de manera general y particular el próximo martes 02 de septiembre. La comunidad internacional, la conservación de nuestros mares y las generaciones presentes y futuras lo agradecerán, ya que de esta forma Chile podrá avanzar en la elaboración de reglamentos y planes de acción para implementar una adecuada conservación y uso no letal de los cetáceos asociados al desarrollo de las comunidades costeras. Ello evitará que las actividades de turismo de observación continúen aumentando de manera desordenada en nuestro país, lo cual frustraría esta oportunidad única para la conservación de los cetáceos y dificultaría la regulación a futuro de las actividades de turismo de avistaje ya consolidadas.

Finalmente Chile, como representante del bloque de países conservacionistas de América Latina denominado “Grupo de Buenos Aires”, podrá llegar a la próxima Reunión Intersesional de la Comisión Ballenera Internacional (CBI), que se celebrará en EEUU el 15 de septiembre, con el Santuario de Ballenas en sus aguas jurisdiccionales convertido en una realidad, constituyendo un paso estratégico para la defensa de la vida en nuestros mares.

(EcoPortal, 03/09/2008)