El Grupo Ence aseguró hoy que opera con normalidad todas sus actividades en Uruguay, desmintiendo así que el Gobierno de Montevideo haya suspendido sus operaciones en el país por una presunta tala ilegal de árboles, tal como había denunciado ayer Greenpeace, ONG ecologista contra la que la empresa de celulosa gallega estudia emprender acciones legales por "afirmaciones falsas".
La empresa precisó en un comunicado que la Autoridad Nacional de Hidrografía otorgó la semana pasada a Ence la autorización para la construcción de un puerto, así como la Autorización Ambiental Previa del 'Proyecto de Celulosa, Energía Eléctrica e Instalaciones Portuarias en Punta Pereira', en el departamento de Colonia, otorgada en junio pasado.
Asimismo, negó categóricamente que Ence haga o haya hecho talas ilegales de bosques, en referencia a lo publicado por Greenpeace sobre la tala ilegal de 80 hectáreas de monte indígena en el departamento de Paysandú. "Esas 80 hectáreas se ubican dentro de terrenos propiedad de Ence, fuera de monte nativo, en una zona de intersección", aclaró la compañía.
Ence explicó también que en agosto de 2006 la Dirección Forestal de Uruguay le otorgó la correspondiente autorización para limpieza y tala de 700 hectáreas dentro un terreno propiedad de la compañía con una extensión total de 900 hectáreas, "en una zona comprendida entre pradera y monte nativo", compuesta por manifestaciones vegetacionales recientes, situada en el departamento de Paysandú.
Sin embargo, la empresa reconoció que, "debido a un error en la interpretación de los planos", al efectuar esos trabajos de limpieza y tala se realizaron "intervenciones" en una "zona lindera a la autorizada", aunque precisó que nada más identificar este error, lo notificó y aclaró a la Dirección Forestal del Gobierno uruguayo, asumió su error "y las medidas que la autoridad competente disponga".
Además, subrayó que en el marco de su política de responsabilidad social corporativa, ha ofrecido medidas compensatorias que están siendo evaluadas por las autoridades. "Es completamente falso que la empresa haya intentado ocultar este error y menos aún mediante la quema de restos", añadió Ence, que en todo caso aclaró que quemar restos en una "práctica habitual" tras efectuar labores de limpieza en cualquier terreno como medida de "prevención contra incendios".
Por último, insistió en que es "completamente falsa" la afirmación de que Ence se dedica a la destrucción indiscriminada de árboles centenarios, y recuerda que lleva 18 años Uruguay donde desarrolla una gestión forestal "sostenible" en estricto cumplimiento de la legislación y normativa vigente, y certificada por FSC, "proceder que ha caracterizado a la empresa desde su llegada a Uruguay en 1990".
En la actualidad la compañía gestiona más de 170.000 hectáreas en Uruguay, de las cuales más de 7.000 hectáreas son naturales, incluyendo 4.500 hectáreas de monte nativo, donde lidera y desarrolla planes de conservación de estos montes, humedales, palmares y otras especies de flora y de fauna autóctona para su conservación y la reproducción de especies en peligro de extinción.
Greenpeace denunció ayer que Uruguay suspendió temporalmente las actividades de la empresa por talar 80 hectáreas de bosque natural protegido en Paysandú para destinarlas a la plantación de eucaliptos. "Es un hecho muy grave ya que el bosque indígena está expresamente protegido por la ley 15.939 y su tala sólo puede hacerse mediante autorización del Ministerio, de la que Ence no disponía", indicó.
(EP, Ecoticias, 28/08/2008)