Las 430.000 hectáreas de superficie arbolada en las que se cultiva la madera para hacer papel representan el 20 por ciento del CO2 ahorrado en los sumideros forestales españoles entre 2003 y 2005 (los últimos datos disponibles), según la Memoria de Sostenibilidad de la Asociación Española de Fabricantes de Pasta, Papel y Cartón (ASPAPEL).
En general, los ecosistemas forestales españoles ahorraron a la atmósfera 26.52 millones de toneladas de carbono durante ese periodo de tiempo, lo que supone un incremento de CO2 almacenado del 5,5 por ciento. De ese porcentaje total, las plantaciones de pinos y eucaliptos para uso del sector papelero absorbieron 5.05 millones de toneladas de carbono, que supone un incremento del 12 por ciento en ese periodo, y cerca del 20 por ciento del ahorro total conseguido.
En un comunicado, la asociación cifra en un 8,9 por ciento el incremento de la superficie forestal arbolada durante 2003 y 2005, hasta los 16,6 millones de hectáreas, y en un 6,6 por ciento el aumento de la superficie de las plantaciones destinadas a producir madera para el sector papelero, hasta las 426.528 hectáreas.
Según ASPAPEL, los árboles de especies de crecimiento rápido, utilizados por las empresas papeleras, son "grandes sumideros de CO2 que ayudan a frenar el cambio climático". Además, la organización señala que el carbono almacenado no se libera con la tala del árbol, sino que permanece en los productos forestales.
Así por ejemplo, el CO2 absorbido por un árbol permanece en los libros que se fabriquen con su madera y, a través del reciclaje del papel se "va ampliando el plazo de ese secuestro del carbono". "Un kilo de papel almacena 1,3 kilos de CO2", afirman los papeleros.
Por otro lado, la memoria señala que el 94 por ciento de la superficie forestal gestionada por el sector ya tiene certificado forestal y, asimismo, el 93 por ciento de las fábricas de celulosa, el 16 por ciento de los proveedores de madera al sector y el 71 por ciento de los proveedores de celulosa.
(EP, Ecoticias, 06/08/2008)