La Asociación de Agricultura del Alto Paraná (ASAGRAPA) exigió este martes que se investigue la muerte del niño Jesús Giménez, en la colonia Leopoldo Perrier, distrito paraguayo de San Cristóbal. Los campesinos aseguran que el niño murió intoxicado. Los trabajadores rurales organizados en ASAGRAPA denuncian que los agrotóxicos utilizados por productores sojeros en cultivos intensivos afectaron la salud de pobladores de la colonia en el departamento del Alto Paraná.
Los campesinos intensificaron sus reclamos desde agosto del año pasado, cuando murió el niño Jesús Giménez. Piden que la cooperativa brasileña Pindó detenga las fumigaciones que afectan a la colonia. Además, señalaron que se sienten intimidados por la presencia policial y militar en la zona desde hace algunos días. El representante de ASAGRAPA, Tomás Zayas, indicó que la Cooperativa Pindó presentó siete denuncias judiciales contra él, dos concejales y un profesor por sus reclamos a las fumigaciones.
Zayas aseguró que las denuncias son reacciones frente a la resistencia del sector campesino del Alto Paraná a la extensión de latifundios de soja transgénica en la región. En los últimos años, Paraguay vivió una enorme extensión de monocultivos de soja transgénica, dominados por empresarios brasileros y promovidos por el estado paraguayo.
Por otra parte, los trabajadores rurales denuncian que el gobierno paraguayo intensificó la militarización del campo y la criminalización del sector campesino. La extensión de la soja produjo una fuerte deforestación y el uso masivo de pesticidas que desencadenaron la migración de campesinos a las ciudades y a otros países como Argentina, España o Estados Unidos.
(La Biodiversidad, 10/04/2008)