El nuevo Plan para el Uso Sostenible de la Energía y Prevención de Cambio Climático que el Ayuntamiento de Madrid ha diseñado para los años 2008-2012 evitará la emisión de unas 700.000 toneladas de gases contaminantes al año, según datos municipales, permitiendo así que, en 2012, se rebaje en un 1 por ciento los valores registrados en 2004.

Esta iniciativa cuenta con 55 propuestas, entre las que se cuentan la creación de una Agencia Local de la Energía que gestionará el Plan; el desarrollo de una Ordenanza de Uso Sostenible de la Energía, diversas campañas de sensibilización y concienciación para diversos colectivos o el fomento de la movilidad sostenible con un Plan de Movilidad Urbana.

En este sentido, se promocionará la creación de una red de suministro de biocombustibles para el transporte, para lo cual el Ayuntamiento negocia ya con el sector del taxi con el objetivo, según el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, de "alcanzar un compromiso específico para que, en un determinado plazo de tiempo, toda su flota (el 20 por ciento del parque automovilístico madrileño) sea ecológica".

Aunque aún no hay detalles, dicha red de suministros podría configurarse con puntos en espacios municipales, en algún tipo de 'estación de servicios' o en las mismas gasolineras ya existentes. Además, el Ejecutivo local busca fórmulas para garantizar que los taxistas no se verán perjudicados en su vida privada por la adopción de este nuevo tipo de vehículos.

Por otra parte, se buscará además la colaboración con instituciones y organismo públicos y privados, entre ellos otros sectores de transporte que contribuyen ampliamente a la emisión de gases contaminantes en la ciudad.

Un Plan Director de Infraestructuras Energéticas, la divulgación sobre los biocombustibles, la sensibilización a la hora de comprar vehículos nuevos y de alquiler, o la creación de un sistema de CarSharing, como ya existe en otros países europeos como Alemania, son algunas de las medidas que afectan al transporte.

Además, se incorporará un informe ambiental complementario a la Inspección Técnica de Edificios y se fomentará la Certificación Energética de Edificios; se intentará reducir el consumo de electrodomésticos y aires acondicionados; se integrarán sistemas de captación de energía solar en edificios municipales y se establecerá una auditoría de eficiencia energética en las pymes industriales.

En cuanto a las medidas para aumentar la capacidad de 'sumidero' en la ciudad, el Ayuntamiento plantará un millón y medio de árboles en esta legislatura y se crearán los 'tejados verdes', superficies impermeables al agua y resistentes a las raíces con sistemas de desagüe, filtros y suelos para el crecimiento de plantas.

Por último, el Consistorio promoverá estudios de evaluación y diagnosis de los posibles impactos del cambio climático en la ciudad y las opciones de adaptación existentes. En total, el Ayuntamiento planea invertir 101,2 millones de euros en la puesta en marcha de las 55 medidas.

COMPROMISO DE FUTURO
Gallardón, que estuvo acompañado en el acto de presentación del Plan, en los Jardines de Cecilio Rodríguez de El Retiro, por la delegada de Medio Ambiente, Ana Botella, destacó que esta iniciativa es "un compromiso de futuro, cuyos efectos se extienden no sólo a las futuras generaciones que habitarán esta ciudad, sino a las que habitarán todo el planeta".

Además, aseveró que el crecimiento económico no es incompatible con el cuidado del medio ambiente. "Entre 1999 y 2007, el PIB de la ciudad creció un 83,2 por ciento, mientras las emisiones de gases de efecto invernadero no superaron el 15 por ciento" establecido como límite por Kioto.

Botella, por su parte, subrayó que, mientras ése era el panorama en la capital, en España "el PIB se situó en el 71,5 por ciento pero las emisiones alcanzaron el 47 por ciento". "España no ha cumplido Kioto", criticó.

Además, con el nuevo Plan Madrid asumirá el compromiso de 2012 de disminuir aún un 1 por ciento las emisiones generadas en 1990, lo que supondrá que 700.000 toneladas de gases contaminantes no saldrán a la atmósfera cada año.

En total, las políticas medioambientales del Ayuntamiento durante estos años "han logrado que dejen de emitirse 3,3 millones de toneladas", gracias a lo cual las estimaciones prevén que, en cuatro años, Madrid "emitirá poco más de 13 millones de toneladas, 2,1 millones por debajo del tope establecido por Kioto".

Asimismo, el Plan permitirá que la ciudad cumpla los objetivos fijados por la Unión Europea de reducir los gases que se generaban en 2004 en un 20 por ciento antes de 2020 y en un 50 por ciento antes de 2050.

"Las actuaciones también harán de Madrid una ciudad menos dependiente energéticamente y dotada con una red de suministro más eficiente, que aumentará su capacidad para absorber dióxido de carbono, y mejorará también su potencial para gestionar y obtener recursos de los residuos urbanos", añadió Gallardón.

En este sentido, Botella anunció la próxima creación de "dos plantas de biometanización de materia orgánica que obtendrán biogás del 60 por ciento de la materia orgánica que se genera en la ciudad" y enumeró las diferentes iniciativas ya puestas en marcha por el Ayuntamiento, como la depuración de agua, la flota verde de vehículos, la apuesta por el transporte público o la gestión de residuos.

(Europa Press, Eco Portal, 20/02/2008)