Delegados de la Comisión Administradora del Río de la Plata (CARP) se encontrarán del 26 al 28 de este mes en Buenos Aires para conversar sobre la planta de celulosa que la pastera española Ence comenzó a construir en Conchilla, Colonia, a la vera del amplio río compartido, confirmaron a Clarín fuentes de las cancillerías argentina y uruguaya.

La Argentina dio su aval a Ence a fines de 2006, cuando los directivos de la compañía anunciaron con bombos y platillos en la Casa Rosada que habían decidido mudar su proyecto original en Fray Bentos a Conchillas. Pero ahora la administración de Cristina Kirchner comenzó a pedirle a la de Tabaré Vázquez detalles de la planta que se instalará frente a las costas de Buenos Aires. En ese marco tendrán lugar las conversaciones de la CARP.

"La Argentina solicitó a través de la CARP que, en cumplimiento del Tratado del Río de la Plata, y su Frente Marítimo, suscripto por ambos países en 1973, Uruguay suministre, a la brevedad, a la Comisión, la información completa sobre el proyecto de Ence", señaló una fuente diplomática argentina.

Con Botnia hubo un pedido similar. Y fue parte del recalentamiento del conflicto con Uruguay, en 2005, porque la Argentina afirmaba que las autoridades orientales no precisaban el tamaño y producción de las dos pasteras proyectadas entonces en Fray Bentos (Botnia y Ence) en el marco de las reuniones de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU). El Gobierno terminó después presentando su demanda ante los tribunales de La Haya, por la presunta violación del Estatuto del Río Uruguay. Y la supuesta no provisión de información formó parte de los argumentos nacionales.

A su vez, la cancillería vecina señala que el proyecto de ENCE está en su etapa inicial y que la aprobación otorgada se limita a los movimientos de tierra preparatorios para la construcción de una planta, que aún no ha sido avalada. Sin embargo, la Dirección Nacional de Medio Ambiente uruguaya aprobaría las obras en cualquier momento. Las fuentes orientales consultadas por Clarín restaron importancia de las conversaciones sobre Ence que tendrán lugar a fin de mes y dijeron que serán de rutina.

¿Qué posibilidades hay de que Argentina decida trabar la marcha de Ence? Pocas. No sólo porque no está dispuesto a fogonear más un conflicto bilateral, sino también por razones políticas y técnicas. Ence es española y no caben dudas de que la Embajada Argentina en Madrid realizó gestiones con los directivos de la firma para que mudaran su proyecto. Y el Tratado del Río de la Plata es considerado más laxo y menos exigente que el Estatuto del Río Uruguay, de 1976.

(Por Natasha Niebieskikwiat, Clarin, 18/02/2008)