La poderosa mafia napolitana, la Camorra, con ramificaciones en toda Europa e intereses en sectores como la droga, la usura, las armas y los contratos públicos, está detrás de la crisis crónica de las basuras en Nápoles (sur), según los expertos.
"Esta crisis es el fruto de una triste mezcla de corrupción, que alcanza niveles récord en la gran ciudad del sur de la península, de impunidad y apatía de la sociedad civil", sostiene el abogado napolitano Massimiliano Marotta, miembro de las asociación de defensa de los derechos de los ciudadanos "Napoli Assise".
En un artículo publicado esta semana, el escritor y periodista napolitano Roberto Saviano, autor del éxitoso libro de denuncia "Gomorra", explicó las razones por las cuales la región Campaña, donde se encuentra Nápoles, se encuentra desde hace catorce años en emergencia permanente.
"Muchas personas ganan sumas inmensas con el tráfico de basuras: tanto los dueños de los vertederos, como lo demuestra el abogado empresario del pueblo de Parete, entre los hombres más ricos de la región, como las firmas alemanas involucradas en su transporte. Pero sobre todo la Camorra, que obtiene ganancias en todas las transacciones y cuenta para ello con políticos amigos", escribió.
"La Camorra comprendió que con los desechos se pueden ganar fortunas", reiteró napolitano, quien aseguró que la organización se ha infiltrado en las empresas que manejan la recolección de basuras y los centros para el tratamiento de los desechos.
"Algunos centros son controlados directamente por la Camorra o contratan miembros o familiares de la organización criminal", declaró.
Los centros para el tratamiento de desechos, donde se recogen, separan y luego compactan en bultos las basuras que serán incineradas, son el origen de la crisis. Toneladas de bultos esperan ser quemadas, pero la región Campaña no dispone de un incinerador, por lo que el gobierno dispuso el martes la construcción de uno, que entrará a funcionar probablemente en un año.
Mientras tanto, los bultos son depositados en vertederos, o almacenados en los mismos centros de tratamiento, que ya están saturados y han sido cerrados.
Otros bultos son enterrados en vertederos ilegales administrados por la mafia, que se hace pagar generosamente por ello.
La inmundicia urbana se mezcla luego con productos tóxicos sin respeto de las normas existentes en Europa.
"Sustancias químicas y radioactivas han terminado por filtrarse en la tierra y la salud de la población corre grave riegos", denunció el geólogo Giovanni de Medici.
Demostrando un gran olfato para los negocios, la Camorra obtendrá probablemente fondos de la Unión Europea por la incineración de los bultos acumulados, ya que en Italia ese sistema es considerado como una fuente de energía renovable, según explicó Marotta.
"¡Es una situación surrealista! ¡Los centros de tratamiento recibirán dinero por haber producido bombas ecológicas!", clamó el abogado.
Según la Organización Mundial de la Salud, en esa región italiana las posibilidades de morir por cáncer (tumores y leucemias) son hasta 12 veces superiores del resto de Italia debido al alto nivel de dioxina y sustancias tóxicas en el aire.
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La Republica, 10/01/2008)