La Coordinadora Nacional para la Defensa del Ecosistema Manglar del Ecuador, ante las declaraciones públicas realizadas por el Ministro de Petróleos y Minas Galo Chiriboga a un diario de la ciudad de Quito, manifiesta su rechazo al modelo económico orientado a las prácticas extractivas de los recursos naturales del país que constituye un atentado contra los ecosistemas y los derechos de los pueblos ancestrales
Las industrias extractivas al contrario de beneficiar la economía del país o ser un aporte al desarrollo, como ha sido el discurso oficial del los gobiernos neoliberales, lo que han ocasionado es la destrucción del patrimonio natural de los ecuatorianos y ecuatorianas, afectado la calidad de vida de poblaciones locales, deprimido las economías locales y han puesto en riesgo a pueblos ancestrales que viven vinculados a los ecosistemas.
Los proyectos mineros a gran escala en cuencas altas de las provincias marino costeras constituyen una amenaza para las cuencas estuarinas, que ya han sufrido los embates de la actividad industrial de la acuacultura del camarón y que con descargas producidas por actividades mineras, están sufriendo ya un total deterioro.
Pedimos a las autoridades cumplir con sus promesas de cambio y de protección de los derechos de las comunidades y ajustarse a las leyes que obligan a que se respeten los derechos a un ambiente sano y ecológicamente equilibrado. Manifestamos nuestro incondicional apoyo a la resistencia de los compañeros y compañeras directamente afectados y amenazados por la actividad minera industrial y que por su incansable defensa de la vida son agredidos permanentemente.
(COORDINADORA NACIONAL PARA LA DEFENSA DEL ECOSISTEMA MANGLAR DEL ECUADOR/La Biodiversidad, 25/09/2007)